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¿LO CONOCES?
Se trata de un trastorno que te hace fingir enfermedades. El síndrome de Munchausen por poderes es el más habitual.
¿Habías oído hablar alguna vez del síndrome de Munchausen? Se trata de un trastorno que sufren algunas personas a través del cual se inventan que están enfermas. Incluso fingen los síntomas de la enfermedad que supuestamente sufren para recibir atención médica cuando en realidad no les pasa nada. Una forma muy común de este es el síndrome de Munchausen por poderes. Te contamos los detalles.
Fue descrito por primera vez en 1951 en la revista The Lancet. Generalmente, quienes sufren este trastorno son cuidadores de persona dependientes que se inventan, exageran o provocan síntomas o enfermedades en esa persona.
Tal y como aseguran en un artículo del medio The Conversation, el síndrome de Munchausen se considera un trastorno artificial por poderes en la clasificación diagnóstica actual.
El término por poderes indica que el cuidador tiene un control significativo sobre la atención médica de la persona dependiente, por ejemplo un niño o un adulto con capacidad disminuida, y utiliza dicho poder para confundir de forma autointeresada a los profesionales de la salud. Su intención es buscar atención médica y simpatía para él mismo, a través de la manipulación de la situación de la persona dependiente.
Las investigaciones ya realizadas sitúan a esta enfermedad mental como una combinación de factores psicológicos y sociales. Existen hipótesis que apuntan a que puede darse en personas que han sufrido traumas o abuses durante la infancia. La baja autoestima, la soledad y el deseo de ser el centro de atención también podrían estar relacionados con el desarrollo de este trastorno.
Además, hay otros expertos que lo llegan a relacionar con otros trastornos de la personalidad, tales como el trastorno límite de la personalidad (TLP) o el trastorno antisocial.
Gypsy Rose y su madre, Dee Dee Blanchard, vivían en un pueblo de Misuri (Estados Unidos). Al parecer, Gypsy sufría de múltiples enfermedades, entre ellas, leucemia, epilepsia, distrofia muscular, problemas de visión, disfagia y discapacidad mental.
Todo era mentira. No obstante, las artimañas de Dee Dee llegaban hasta límites insospechados. Por ejemplo, luchó para conseguir que pusieran un tubo de alimentación a su hija.
La situación llegó al punto de que, el 14 de junio de 2015, Gypsy asesinó a su madre junto a Nicholas Godejoh, un novio que había conocido por Internet. La sorpresa fue cuando todos los allegados a la joven descubrieron que podía andar, ver, comer y que tenía pelo. Ni la leucemia ni ninguna otra enfermedad era verdad. Todos esos años había sido víctima del síndrome de Munchausen por poderes.