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ENVIARÁN UNA SOYUZ MS-23
La avería en otra nave espacial rusa que enviaba suministros a la Estación Espacial Internacional obliga a retrasar aún más la vuelta a la Tierra de tres astronautas.
El regreso de dos cosmonautas rusos, Sergey Prokopyev y Dmitry Petelin, y un astronauta estadounidense, Frank Rubio, estaba planeado para marzo. Sin embargo, los problemas relacionados con su vuelta a la Tierra comenzaron el 14 de diciembre del año pasado, cuando tuvieron que suspender su caminata espacial por una fuga de refrigerante de la nave espacial que les debería llevar de vuelta a casa.
Los daños que presentaba la nave Soyuz MS-22, de construcción rusa, no permitían una reentrada segura en la atmósfera, así que Roscosmos y la NASA cancelaron la vuelta a la Tierra de los tres tripulantes en ese vehículo. En ese momento comenzaron a pensar soluciones alternativas.
Mientras tanto, Roscosmos envió otra nave con suministros a la Estación Espacial Internacional, donde siguen los astronautas. Pero esta también ha presentado fallos y su presurización ha caído. Son daños que han producido una "fuga de refrigerante en el sistema de control térmico" de la nave Progress MS-21.
La agencia espacial rusa ha anunciado a través de su canal de Telegramque el exterior de la Progress MS-21 impide que los astronautas tampoco puedan volver en ella. Por tanto ya están pensando en un nuevo vehículo espacial que la sustituya.
Se trata de la nave Soyuz MS-23, que será enviada a principios de marzo. Antes tendrán que desenganchar la anterior nave, todo con la intención de salvaguardar la salud y la vida de los tres astronautas. Asimismo, con su publicación la agencia espacial rusa también confirmaba que el error de la Soyuz MS-22 se debía a un daño externo y que aún continúan investigando qué le ocurrió a la Progress MS-21.