¿Son realmente útiles las tipografías que facilitan la lectura a personas con dislexia?

Desde que somos pequeños y nos enseñan a leer y escribir lo hacemos con formas y letras diferentes. Las personas que presenta dislexia pueden tener dificultad a la hora de reconocer ciertas letras. Se supone que existen ciertas tipografías que están orientadas a facilitar la lectura para las personas que la sufren, pero ¿qué dice la evidencia científica?

Estas tipografías tienen dos características fundamentales. Existen letras como la P O Q y la B y D que se pueden confundir, por ello están muy bien diferenciadas y existe una mayor separación entre las letras, para poder identificarlas correctamente. Existen estudios orientados aestas tipografías. Sin embargo, no existe una conclusión que demuestre que realmente estas tipografías puedan ayudar a la dislexia.

El problema reside principalmente en que dentro de la fuente que utilicemos no existan serifas (adornos ubicados en los extremos que rematan el final de muchos de los caracteres tipográficos). Cuanto más redondeadas son mucho más cómodas de leer e interpretar.

Pero uno de los aspectos más determinantes para facilitar la lectura es el espaciado de letras. Cuanto más juntan estén las letras existen enormes dificultades en su lectura, pero no solo para las personas disléxicas, sino para todos. Cuanto mayor espacio exista entre las letras, no forzaremos tanto la vista y su lectura será mucho más fluida. Esta función se encuentra en la mayoría de los editores de texto y es una adaptación muy sencilla.