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Tres trucos para ver la última luna llena de verano como un profesional

Estos días hay luna llena y, aunque se puede observar a simple vista, con estos trucos utilizados por los profesionales podrás apreciarla mucho mejor.

Llegamos al final de agosto y con él terminan también todos los eventos astronómicos que hemos podido ver en el cielo durante este mes. Pero queda uno de los más importantes que ya se puede observar en el cielo: la superluna azul.

Si observábamos al cielo durante estos días hemos podido ver que la luna estaba más brillante y grande de lo normal. En esta madrugada del 30 al 31 ha sido cuando ha tenido su máximo apogeo, pero todavía se puede ver durante esta noche y con estos trucos que utilizan los profesionales, se aprecia mejor todavía. Te contamos los detalles.

Preparar los ojos para la oscuridad

Tanto si queremos ver la superluna azul como cualquier otro evento astronómico, es importante adaptar los ojos a la oscuridad. Para ello, un truco es usar gafas de sol durante el día, o al menos antes del atardecer. Así, nuestra visión estará muchísimo más acomodada a la oscuridad. Si vamos a estar en casa, por ejemplo, podemos tener las luces apagadas o muy tenues, de modo que la vista pase más tiempo adaptada.

Usar linternas rojas

Una vez que nuestra vista se ha adaptado un poco a esa oscuridad, no debemos "fastidiarla" encendiendo alguna luz o alguna linterna, ya que toda la preparación previa se habría ido al traste. Es por ello que, si necesitamos algo de luz para buscar algo o cualquier cosa, es preferible que sean linternas de luz roja ya que son las que menos afectan a la visión nocturna.

Observar de forma indirecta

Si miramos el cielo con telescopio, hay muchos detalles que podemos tener en cuenta derivados del modo en que nuestros ojos interpretan lo que ven. Es por ello que se recomienda mirar de forma indirecta, es decir, posar los ojos en la periferia. Por ello, para una visión óptima, debemos observar de reojo lo que nos muestra el telescopio.

Además de estos trucos, los expertos recomiendan acudir a zonas oscuras, sin obstáculos físicos ni contaminación lumínica. La Luna, obviamente, se podrá apreciar a simple vista. Además, si se utilizan prismáticos o telescopios se podrán apreciar signos de su superficie, con sus cráteres y demás formaciones.