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SIN MANOS, MAMÁ, JUEGO SIN MANOS
Normalmente la comunicación máquina-persona pasa por usar las manos. Cierto es que existe Siri, la búsqueda por voz de Google, Kinect –si te apetece hacer aspavientos en el aire– pero hasta ahora no se había desarrollado un ratón para los pies. Esto es precisamente en lo que consiste 3DRudder, un extravagante platillo, de forma similar a una báscula (solo que al posar los pies da la impresión de que en lugar de conocer tu peso vas a despegar).
Por si estábamos hartos de usar el ratón, la propuesta va de para mantener libres las manos y menear los pinreles con brío si queremos darle instrucciones al ordenador. El dispositivo se conecta por USB y está destinado a manejar los controles en videojuegos, a disfrutar de la realidad virtual e incluso a perfilar modelos 3D.
El dispositivo funciona, una vez sentado, colocando los pies sobre las dos plantillas destacadas en el platillo. Si el usuario inclina el pie hacia delante, el personaje de la pantalla le corresponde; si lo inclina hacia atrás, retrocede, y a los lados existe la misma equivalencia. También se puede hacer girar el dispositivo, lo que sirve para cambiar la vista, mientras que un pedal permite al usuario mirar hacia arriba o hacia abajo. De esta forma se puede hacer zoom.
Con toda esta funcionalidad, el punto fuerte de usabilidad de 3DRudder es el manejo de la realidad virtual. Hay que tener en cuenta que al calarte unas Oculus o similares se produce una inmersión visual (y sonora) completa en un mundo creado por bits. Y claro, si ves la parte delantera de una montaña rusa que sube y baja dándote la vuelta al estómago en cada pico no puedes manejar adecuadamente el teclado, e incluso puede que te cueste con el ratón.
Los pies, en cambio, dejan las manos libres para echárselas a la cabeza o sujetarse las tripas como si se fueran a salir. 3DRudder cuenta con esta ventaja y quienes lo han probado afirman que es lo suficientemente intuitivo y preciso como para desenvolverse con soltura en los movimientos básicos. Eso sí, como el usuario se estrese con el mundo virtual y pegue un pisotón no hay manera de saber cuánto puede aguantar el dispositivo.
Y es que el platillo-báscula-ratón tiene un límite: soporta hasta 130 Kg de una persona sentada y con los pies apoyados. A partir de ahí empieza a crujir amenazadoramente y corre el peligro de quedar como cuando a Wall.E lo dejaron baldado, con todos los circuitos hechos un desastre.
La idea de 3DRudder, según cuentan sus creadores, viene de una observación relativa a la historia de la Humanidad. Hace cuatro millones de años, milenio arriba milenio abajo, el ser humano (o como se llamara por aquel entonces, porque un homo sapiens en aquella época habría sido el mensajero del futuro, solo que sin el aspecto de Kevin Costner) se puso en pie. Todo este tiempo ha estado haciendo cosas de pie. Y de repente, el mundo digital lo ha convertido en una persona sentada, que usa sus manos pero desaprovecha sus piececitos. De esta conclusión salió este gadget, que se podrá usar en sistemas a partir de Windows 7.