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Te contamos los motivos por los que nunca debes desconectar un televisor OLED de la corriente.
Cada vez más usuarios apuestan por una Smart TV OLED a la hora de renovar su viejo televisor. Las ventajas que ofrecen los paneles de diodos orgánicos emisores de luz han hecho que sean una de las mejores opciones del mercado.
Más que nada porque las Smart TV OLED presumen de unos ángulos de visión infinitos, para que disfrutes de la mejor calidad de imagen independientemente de dónde estés sentado, además de ofrecer unos negros puros ya que este tipo de paneles solo enciende los píxeles necesarios para reproducir la imagen.
Además, con el paso del tiempo los precios de esta tecnología han ido reduciéndose a medida que los costes de producción se abarataban. ¿El resultado? A día de hoy no te costará encontrar una Smart TV OLED de oferta por debajo de los 1000 euros.
Las Smart TV OLED son las mejores del mercado, pero necesitan unos cuidados
El problema es que muchos no saben que esta tecnología requiere unos cuidados muy particulares. Y el más importante consiste en no desenchufar nunca tu televisor OLED de la corriente.
La razón tiene que ver con el gran talón de Aquiles de las Smart TV OLED: los problemas de quemados y retenciones. Este fenómeno se produce cuando una imagen permanece demasiado tiempo estática en la pantalla. Por ejemplo, cuando estás viendo un canal de la TDT, el logotipo de la cadena suele estar fijado en uno de los laterales. El problema es que los televisores OLED cuentan con unos píxeles muy delicados y que se degradan con facilidad. Y al forzarlos para que reproduzcan constantemente la misma imagen, su degradación se acelera.
Por este motivo, cualquier Smart TV OLED actual cuenta con una función llamada ciclo de compensación y que evita este daño en los píxeles para alargar la vida útil del panel. El proceso se realiza de forma automática, pero si la tele está desconectada de la corriente no podrá activarse y reparar los píxeles que se hayan degradado.
Es cierto que los modelos más punteros cuentan con diferentes tecnologías, como la atenuación de zonas con imágenes estáticas, pero no todas las Smart TV OLED cuentan con esta tecnología. Además, independientemente de ello, necesitan pasar sí o sí por el ciclo de compensación para evitar la temida “huella” del logotipo de turno en tu televisor.
Como te hemos explicado, este proceso se activa de forma automática a partir de las cuatro horas de uso. Eso quiere decir que, si tienes la TV encendida más de cuatro horas, en el momento en el que la apagues, comenzará el ciclo de compensación, en el que el panel escanea los píxeles en búsqueda de elementos deteriorados para compensar la degradación mediante diferentes procesos de software.
Como curiosidad, indicar que puedes activar el ciclo de compensación de forma manual, pero no te recomendamos hacerlo, pues puedes dañar el panel con un uso intensivo. Lo único que debes tener en cuenta es que nunca has de desconectar tu tele OLED de la corriente. Da igual que ya haya pasado el ciclo de compensación (el panel hará un sonido muy característico durante el proceso), las Smart TV OLED tienen un consumo energético mínimo cuando están apagadas, así que evita desconectarla de la corriente para no tener dolores de cabeza innecesarios en el futuro.