Una lámpara en el techo cargará tu móvil del futuro (si Microsoft se sale con la suya)

Es probable que, mientras lees este artículo, tu móvil esté conectado al enchufe más cercano, o que lo hayas desenchufado hace poco. Si ninguna de las dos cosas es cierta, échale un ojo al indicador de la batería porque te pedirá auxilio a no mucho tardar.

Aquellos tiempos en los que duraba un par de días han caído en el olvido, y ahora tu smartphone pide combustible cada dos por tres. Por muy inteligente que sea, vive en un constante estado de ansiedad: necesita estar siempre cerca de una toma de corriente, y tú tienes que llevar el cargador encima a todas horas por lo que pueda pasar.

A las grandes tecnológicas no les queda otra que abordar el problema de las baterías (principal piedra de toque de todos los terminales de última generación), pero de momento solo podemos aferrarnos a los indicios de un futuro en que la batería de nuestro móvil no será un dolor de cabeza: inventos extravagantes como cinturones que cargan tu móvil,  baterías más grandes para que las baterías duren más o promesas de baterías ultrarrápidas que se cargan en solo dos minutos. Ahora, parece que Microsoft quiere arrojar luz sobre este asunto (literalmente).

¿Y si una lámpara en el techo fuera suficiente para cargar el móvil? Tres investigadores de Microsoft Research andan tras esta posibilidad y han creado el prototipo de AutoCharge, un sistema inteligente que, con la ayuda de Kinect -y si todo sale como ellos esperan-, permitirá cargar la batería sin enchufar el móvil.

En un estudio recientemente publicado, los expertos analizan algunas de las desventajas de los sistemas de carga inalámbrica que ya existen (gastan demasiada energía y no son del todo seguros) para plantear un método novedoso: cargar los móviles con luz.

Para desarrollar este concepto futurista, los investigadores han creado el prototipo de un cargador lumínico inteligente capaz de alimentar la batería de los móviles (casi) sin que nos demos cuenta.

Entras en la habitación, dejas el móvil sobre la mesa y, cuando lo vuelvas a coger, estará de nuevo listo para la acción. La clave no está en la superficie, sino en el techo, donde una cámara (la de Kinect, según este prototipo) vigila constantemente la habitación para localizar tu dispositivo y activar el cargador.

En cuanto Kinect detecta tu smartphone, una lámpara LED se orienta hacia él y se enciende para alimentar su batería. Según los investigadores, tardará en llegar al 100% de su capacidad lo mismo que si la cargases con un enchufe.

Obviamente, falta algo: si ahora mismo enfocas tu móvil con una bombilla, ni se cargará la batería ni se pondrá moreno. El prototipo de AutoCharge incluye un panel solar que recoge la luz. Y un detalle más: un dispositivo LED informará al sensor de Kinect de la evolución del proceso. Cuando el LED indique que el móvil ya tiene la batería cargada, la luz se apagará y Kinect volverá a ponerse en guardia a la espera de un smartphone que lo necesite.

A día de hoy, AutoCharge es solo un prototipo: está lejos de convertirse en un producto real porque, para empezar, haría falta que los móviles del futuro tuvieran una película fotovoltaica en la pantalla para poder captar la luz.

No obstante, este nuevo invento de Microsoft alimenta ciertas esperanzas: los gigantes de la tecnología saben que estamos hartos de que la batería nos dure poco tiempo y tener que arrastrar un cargador a todas partes. Con un poco de suerte, a medio plazo podremos alimentar nuestro smartphone sin necesidad de cables. De momento, toca buscar el enchufe más cercano. El móvil está a punto de apagarse (otra vez).