Un robot barista puede ser la solución para mantener la distancia en los cafés, ¿sabéis cómo?

No es una profesión que en España cuente con mucho predicamento, aunque en otros países de Europa es lugar donde estos artesanos del café disfrutan de mucho respeto por las auténticas obras de arte que son capaces de realizar para deleite de nuestro gusto. No se trata simplemente de cortar el descafeinado con un poco de leche, sino de algo más, mucho más profundo.

Y en los tiempos que nos ha tocado vivir del coronavirus, una de las condiciones esenciales para combatir a la pandemia será el distanciamiento social, evitar el contacto con otras personas para que la transmisión de la Covid-19 se detenga en seco. Así que, ¿por qué arriesgar la salud de los trabajadores si tenemos a un robot que nos haga las mismas tareas de forma segura?

Algo así han debido pensar en Corea del Sur donde un establecimiento que sirve toda clases de cafés ha contratado a un robot barista capaz de servir las bebidas al gusto de los clientes, lo que garantiza ese distanciamiento social y nos permite entrar en contacto con un artefacto seguro del que solo nos interesa el vaso con el refrigerio que nos prepare.

Rápido, cortés y... ¡ofrece consejos!

Así las cosas, un establecimiento de Corea del Sur, situado en la ciudad de Daejeon, ha dado el paso de convertir a sus camareros en robots baristas que pueden servir a los clientes de una manera rápida, eficiente y segura. Tanto es así que no solo se limitan a servir todo lo que le piden, sino que es capaz de mantener una conversación con los que visitan el local de una manera natural.

Solo hay que pedirle una especialidad para que Storant nos la sirva sobre su bandeja y acompañe esa petición con un mensaje: “Aquí está tu café con leche de almendras Rooibos, disfruta. Es aún mejor si lo agitas". Por lo que no solo nos llevamos eso que pedimos, sino también un consejo que va dirigido a hacernos mucho más provechosa la experiencia en el local. Es más, estos trabajadores no se limitan a traernos la bebida, sino que también toman nota de la comanda y más tarde van a recogerla a la cocina, donde nos la envían. Y su eficacia está más que testada: seis bebidas pueden ser procesadas, preparadas y servidas en apenas siete minutos.

Uno de los directores de la investigación de Vision Semicon, que llevó a este robot hasta la tienda, Lee Dong-bae, afirmó que "nuestro sistema no necesita aportes de las personas desde el pedido hasta la entrega, y las mesas se organizaron escasamente para garantizar movimientos suaves de los robots, lo que encaja perfectamente con la actual campaña de [...] distanciamiento" a causa de la crisis del coronavirus.

Pero no creáis que solo los robots camareros son los que forman parte de este sistema automatizado, éste se complementa con otro principal que es el que recibe los pedidos y los prepara, para entregárselos a los más pequeños que son los que los trasladan, uno por uno, a todas las mesas. Por si no fuera poca su capacidad de trabajo, esta plataforma es capaz de servir un total de 60 tipos distintos de cafés sin que medie la mano del hombre en todo el proceso. Bueno, sí hay un operario, que se dedica a la confección de dulces, además de otras tareas de limpieza y mantenimiento de los ingredientes de los robots.

Para algunos de los clientes, tratar con robots fue divertido y "fácil porque no tienes que recoger tu pedido", te lo llevan, pero sin embargo sí que fueron consciente del grave problema que puede provocar en el mercado laboral, "ya que muchos de mis amigos están haciendo trabajos a tiempo parcial en cafeterías y estos robots reemplazarían a los humanos".