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La demanda de los AirPods 3 no está siendo la esperada.
La firma de Cupertino lanzaba hace unas semanas varios productos en su Keynote del 8 de marzo pasado. En ella conocíamos el nuevo iPhone SE, los ordenadores Mac Studio, y en definitiva lo úiltimo de los de Cupertino. Ahora conocemos que la marca californiana podría presentar antes de terminar el año nuevos modelos de sus auriculares. Concretamente estaríamos hablando de una nueva versión de su modelo más avanzado, los Pro, mientras que la generación de sus AirPods originales más modernos no está siendo el éxito esperado.
Una demanda más floja de lo esperada
Hasta ahora la estrategia de Apple con sus auriculares ha sido bastante consistente, pero este año han decidido que convivan dos generaciones diferentes de sus auriculares, de la versión más accesible, tanto los AirPods de segunda generación, como los de tercera generación lanzados recientemente. Esto, que debería ser algo positivo, está siendo un lastre para los modelos lanzados recientemente. Parece ser que la demanda de la tercera generación de los AirPods está siendo bastante floja, y que, al convivir con la primera, que vale 50 euros menos, está teniendo poco tirón entre los consumidores, que prefieren gastarse menos dinero y entienden que la diferencia en este aspecto no justifica su compra.
De hecho, Apple ha recortado un 30% las previsiones de ventas de sus AirPods de tercera generación como consecuencia de esta demanda tan floja. Parece ser que la segmentación de la gama de auriculares de Apple ha sido errónea, y ha propiciado que las ventas no sean las esperadas en ningún momento. Concretamente ha sido el analista cercano a Apple, Ming-Chi-Kuo, quien ha desvelado estos detalles sobre la demanda de los AirPods. Además de eso, ha avanzado que los de Cupertino en consecuencia actuarán de forma distinta en el lanzamiento de los AirPods Pro de segunda generación.
Todo apunta a que cuando estos lleguen al mercado, según este analista, a finales de este año, los modelos actuales se descatalogarán, al contrario de lo que ha ocurrido precisamente en el caso de los AirPods de tercera generación. Y precisamente para que no se repitan los mismos errores que han llevado a una demanda tan floja de la tercera generación de sus AirPods. Y es que seguramente Apple no sea la empresa más indicada para andar simultaneando modelos antiguos con los más modernos, algo que tiene una explicación sencilla.
Porque en el caso de Apple, y concretamente en los AirPods, muchos consumidores se conforman con tener el modelo más económico. Ofrece unas prestaciones muy parecidas al modelo más caro, y al fin y al cabo es la forma más económica de contar con todo unos auriculares de Apple a un precio que no había sido tan accesible en mucho tiempo. Por tanto, es lógico que la demanda de la tercera generación sea tan pobre. De todas formas, en algún momento Apple tendrá que descatalogar los AirPods de segunda generación, y volver a fijar en 199 euros el precio de partida de sus auriculares más accesibles.