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EL TRUCO DEFINITIVO
Las alertas de mails o una bandeja de entrada pueden suponer un gran problema para llevar al día el correo y en especial si queremos tenerlo ordenado.
Por cualquier motivo no has podido mirar tu correo en varios días y cuando lo haces… el estrés se apodera de ti. Decenas de mails de publicidad, mensajes de páginas que ni recuerdas haber hecho login, avisos de compañeros de trabajo y un largo etcétera de correos que sólo invitan a cerrar sesión.
Las alertas de mails o una bandeja de entrada pueden suponer un gran problema para llevar al día el correo y en especial si queremos tenerlo ordenado. ¿El mejor truco para no vernos sobrepasados? Realmente dos: Un poco de tiempo y ser conscientes de las prioridades.
El primero de los trucos, el tiempo, consiste en dedicar 10 minutos al día a organizar el correo. Generalmente se recomienda al inicio de la jornada. Echa un vistazo a tus mails, decide cuáles merecen la pena, cuáles borrar, a quién escribir, etcétera. Puede que al principio cueste, pero en apenas unos días habrás creado la rutina.
Por último, las prioridades. Y en este campo ya podríamos estar hablando incluso por el bien de nuestra salud mental. Tenemos que ser capaces de decidir qué merece la pena ser respondido y qué no. Habrá mensajes que jamás vayamos a responder y debemos asumirlo, cuanto antes mejor. Marca un ritmo, ve respondiendo poco a poco; y recuerda, no hace falta extenderse con las respuestas. Ser claro, conciso y educado es mucho más importante.