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ACCESO DIRECTO
Acceder a la IA de Google es más sencillo que nunca gracias a su integración en el navegador más popular del mercado.
Casi a diario nos encontramos con actualizaciones y novedades, la implementación de la inteligencia artificial en nuestro día a día está siendo constante. Algo que venimos notando durante meses con la integración de Gemini por parte de Google en sus aplicaciones. El modelo de inteligencia artificial de los de Mountain View lleva tiempo presente en su navegador, aunque ahora podemos chatear una de forma mucho más directa, incluso desde la barra de direcciones. A continuación, te contamos cómo.
A partir de ahora no será necesario acceder a Gemini abriendo ninguna aplicación, ni pestaña en el navegador, la forma de invocarlo para pedir su ayuda se simplifica y son necesitamos más que abrir una ventana de Chrome y teclear en la barra de direcciones, como hacemos habitualmente, lo que necesitamos de él. De manera que del mismo modo que realizamos una búsqueda podemos realizar nuestras consultas, de una forma rápida y directa.
Además de leer el resultado también podemos escuchar el contenido de la misma. E incluso valorar lo nos ha parecido la respuesta con pulgares arriba y abajo, compartirlo con otros usuarios, copiar el texto o informar si existe algún problema legal con la respuesta generada.
Podemos pedir cualquier cosa, se trate de una tarea compleja o creativa. Desde que nos ayude a encontrar información acerca de un tema o nos escriba un relato. Aunque no podemos pedirle que pinte un cuadro o nos genere una ilustración, el Gemini es un modelo de lenguaje, con el que no podemos generar imágenes. Poco a poco el modelo se va integrando cada vez más en los entresijos de las aplicaciones, de forma que no se trata de una herramienta que funciona de forma independiente, sino que ya está dentro del propio navegador y podemos usarlo de forma natural sin salir de este. Algo que facilita el acceso a este a la información que puede proporcionarnos.
Aunque para muchos usuarios compartir tu experiencia de uso, les genera cierto rechazo ya que creen que vulnera su privacidad. Lo cierto es que, en parte es necesario, compartir nuestra experiencia es la forma en que el algoritmo aprende y puede desarrollarse, además de mejorar el servicio. Por lo que Google ha encontrado la forma de que podamos seguir usando sus servicios dando al usuario a elegir si quiere o no ser partícipe del proceso. Como sucede con las sugerencias en su tienda de aplicaciones.