La película más pequeña del mundo

Por suerte nuestras madres no se han topado con el entretenimiento de los científicos de IBM que, en lugar de divertirse con canicas, lo han hecho con unos cuantos átomos.

En concreto, los doce que han conseguido mover en los laboratorios de la compañía estadounidense, y que han logrado almacenar en un bit de memoria. Todo un avance, el de desplazar átomos, que permitirá a los dispositivos del futuro guardar información a niveles antes nunca vistos.

Para dejar constancia de su hazaña y distraerse un rato los científicos de IBM filmaron un vídeo de un minuto y medio con los átomos. Para ello, los investigadores utilizaron un microscopio de efecto túnel, el ideal para tomar imágenes de las partículas más pequeñas del universo.

Los protagonistas de la película, un niño y su pelota, son obra de los doce átomos y han sido los responsables de que IBM se haya llevado el récord Guinness a la película más pequeña del mundo. Para que luego digan que la ciencia no es divertida.