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ANSIEDAD E INCOMODIDAD
Un estudio demuestra que el 81% de los millennials y la generación Z experimentan ansiedad antes de realizar llamadas telefónicas y optan por formas de comunicación menos directas
¿Eres de los que siempre tienen el móvil en silencio o prefieres tener las notificaciones y llamadas con sonido? Cada vez es más común que la posibilidad de enfrentarnos a llamadas, incluso de números que conocemos, produzca ansiedad o incomodidad.
WhatsApp y otras redes sociales han cambiado nuestra forma de comunicarnos, priorizando la inmediatez y la convivencia. Los audios se han convertido en una opción popular, ya que permiten enviar mensajes sin esperar respuesta inmediata y escuchar cuando sea conveniente. Sin embargo, esta tendencia podría tener un impacto negativo en nuestras habilidades de comunicación.
Y es que, los jóvenes de hoy en día tienen una clara preferencia por las aplicaciones de mensajería instantánea sobre las llamadas telefónicas tradicionales. Según un estudio realizado por BankMyCell. El estudio muestra que el 81% de los jóvenessiente ansiedad antes de reunir el valor suficiente para realizar una llamada telefónica. Además, el 75% considera que recibir llamada es intrusivo.
En una encuesta a 1.200 millennials estadounidenses nacidos entre 1981 y 1996, se observó que los jóvenes prefieren los métodos de comunicación asíncronos como los mensajes de texto. Esta preferencia se basa en la comodidad de poder preparar lo que van a decir y revisar un mensaje antes de enviarlo, en lugar de enfrentarse a la presión de improvisar en una llamada.
Los resultados del estudio resaltan la creciente tendencia de los jóvenes a optar por formas de comunicación más controladas y menos directas, como la mensajería instantánea, lo que indican un cambio en la forma en que se comunican las nuevas generaciones.
Hay muchos factores que afectan a esta preferencia, pero el uso excesivo de audios puede llevar a una dependencia de la comunicación asíncrona, en la que le emisor controla cuándo y cómo se trasmite su mensaje. Esto puede contribuir a una sensación de desconexión y falta de empatía en las conversaciones.
A medida que la tecnología sigue evolucionando, es fundamental encontrar un equilibrio entre la conveniencia de los audios y la calidad de la comunidad humana.