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LLEGARÍA EN SOLO UNOS MESES
Se convertirá en el móvil más asequible de Apple, y esta nueva generación promete ser la más revolucionaria de cuantas se han lanzado a lo largo de estos años.
Parece que el iPhone SE 4 está más cerca que nunca, y no por la obvia razón de que cuanto más tiempo pase más cerca lo tendremos, sino porque desde hace meses se espera que esta nueva generación se lance el próximo mes de marzo o abril, en plena primavera. Un nuevo SE que será el más avanzado y grande de la historia de esta gama, tal y como nos demuestran las nuevas informaciones que se han filtrado ahora y que desvelan detalles muy interesantes, sobre todo en lo relacionado con su tamaño.
Uno de los aspectos más destacados de los diferentes iPhone SE ha sido su diminuto tamaño, que de media se ha movido entre las 4 y 4,5 pulgadas de los primeros iPhone, un panel que hoy en día ya es historia de la telefonía móvil. En esta ocasión hemos conocido más detalles que nos confirman los rumores que conocimos en los últimos meses, sobre que se convertiría en una variante más de los iPhone estándar, en este caso del iPhone 15, aunque ahora sabemos que tendrá mucho en común con el iPhone 14.
Estas nuevas informaciones apuntan a que el iPhone 4 SE estará basado en el chasis del mismo iPhone 14, por lo que es evidente que tendrá que compartir tamaño con este. Concretamente a pesar de usar ese mismo chasis contará con un peso de solo 165 gramos, siendo alrededor de 7 gramos más ligero que el iPhone 14. Por tanto, es evidente que en componentes será muy similar salvo en algunos aspectos puntuales.
Se espera que llegue con una cámara sencilla, de un solo sensor, por lo que será la gran diferencia a nivel visual respecto de los móviles estándar de Apple. Recordemos que todos los iPhone SE anteriores han contado con una cámara sencilla, por lo que era de esperar que ocurriera lo mismo en este caso. Todo hace indicar que el nuevo teléfono asequible de los californianos tendrá un diseño bastante similar al del iPhone 14.
Hasta el punto de que en la parte delantera tendremos también una ceja con el notch característico, que incluye el Face ID, por lo que este modelo dejará de lado por fin el Touch ID que lo ha acompañado desde el principio para sustituir la huella por el reconocimiento facial. La cámara de la que hemos hablado contará con un sensor de 48 megapíxeles, algo que nos extraña bastante, porque lo normal es que siguiera contando con la cámara original de 12 megapíxeles, pero todo puede ocurrir.
Será tan parecido al iPhone 14 que incluso conservará el clásico botón de acción con el que ha contado siempre este modelo, en lugar del capacitivo que han estrenado los iPhone 15. Y por supuesto, como se ha visto obligada Apple, tendremos por fin el conector USB tipo C también en este modelo, a diferencia del Lightning que hemos visto en todas las versiones anteriores, y como han estrenado también los iPhone 15. Se espera que sea lanzado en primavera por un precio de alrededor 600 o 700 euros.