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POR PRIMERA VEZ NO COMPARTEN PROCESADOR
Comparamos las principales características de ambos modelos, más diferentes que nunca.
Apple presentaba ayer sus nuevos teléfonos, y como no, la expectación ha sido enorme. Sobre todo, porque este año los modelos estándar y los Pro son más diferentes que nunca. Por eso se hace más difícil que nunca, o quizás todo lo contrario, decantarse por uno o por otro. Por eso queremos plasmar las principales diferencias entre ambos teléfonos, en los apartados más importantes de sus fichas técnicas. Porque esas diferencias son notables en algunos aspectos que convendría conocer.
Pantalla
Este es uno de los aspectos más notables sencillamente porque es el que todos vemos antes de usarlo a fondo. Y es que mientras los iPhone 14 conservan la misma pantalla de sus predecesores, con el gran notch en su parte superior, los iPhone 14 Pro estrenan uno nuevo en forma de muesca, que además Apple ha transformado en un centro de notificaciones muy completo llamado Dynamic Island.
Este es un aspecto que hace único el diseño de los modelos Pro respecto del estándar. Pero hay más, porque la pantalla de los modelos Pro cuenta con un brillo de 2.000 nits, el más alto que se ha visto en un teléfono móvil, y que por supuesto supera al de sus compañeros de gama.
Procesador
En este apartado nunca antes habían existido diferencias, pero este año, vaya si existen. Porque el iPhone 14 se queda con el mismo Apple A15 Bionic que tenía su predecesor, por lo que en este aspecto no notaremos diferencias. Solo los iPhone 14 Pro y Pro Max contarán con el nuevo procesador Apple A16 Bionic, y por tanto verán mejorado su rendimiento de forma notable. Este es uno de los mayores puntos a favor de los nuevos modelos Pro, ya que es algo que no había pasado nunca antes con los teléfonos de Apple.
Cámara
Aquí también hay cambios notables, ya que mientras que las cámaras de los iPhone 12, que como sabéis constan de dos sensores, no han cambiado prácticamente en nada, solo detalles. En el caso de los iPhone 14 Pro los cambios son mucho más profundos. Ya que estrenan un nuevo sensor de 48 megapíxeles. Por tanto, se multiplica la resolución y el tamaño de las fotos que obtenemos con esta cámara. Esto es otro punto a favor de los modelos Pro que vamos a notar y mucho en el día a día, tanto a la hora de hacer fotos como de grabar vídeos.
¿Cuál deberías elegir?
Pues este año la elección es más clara que nunca. Porque precisamente nunca antes habían existido tantas diferencias entre ambos modelos. Una pantalla distinta y más moderno, un procesador más potente, y una mejor cámara de fotos justifican y mucho la diferencia de precio entre ambos modelos. Es verdad que hay 300 euros de diferencia entre las versiones básicas de ambos. Pero si tenemos en cuenta que el iPhone 14 ya cuesta más de mil euros, puestos a hacer una inversión así es recomendable si o sí hacerse con la versión Pro, aunque sea en su tamaño más compacto.
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