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COMO MÍNIMO HASTA 2020
A pesar de todo lo que se habla acerca de nuevos dispositivos de la marca en el futuro, Apple seguirá dependiendo del iPhone como pilar de su negocio
Ahora mismo no cabe duda de que lo que provoca que el valor de las acciones de Apple suban o bajen son las ventas del iPhone. Puede que el sector de servicios se alce poco a poco como un buen segundo soporte, pero es el teléfono de Apple y todos los servicios y plataformas que hay a su alrededor los que hacen que ahora mismo la compañía esté en valoraciones mercantiles de récord.
Y Gene Munster, conocido analista que hasta hace poco estuvo trabajando para Piper Jaffray, ha afirmado que eso va a seguir siendo así durante como mínimo dos años más. La generación de iPhone de 2018 que va a salir a finales de verano y la del año que viene van a seguir intentando ser los líderes del mercado y provocando que Apple siga creciendo todavía más.
Una vez hayan adoptado la forma del iPhone X, esos teléfonos seguirán evolucionando de forma lineal: mejores cámaras, más potencia y pantallas de mejor calidad. Nada revolucionario, nada como un “iPhone plegable” que cambie la forma en la que vemos un smartphone. Munster cree que entre ahora mismo y el final de 2019 se habrán vendido 220 millones de unidades más de esos iPhone.
Munster, además, opina que Apple va a cambiar de enfoque y va a limitarse a convencer a los inversores de las buenas ventas de sus dispositivos. Según él vamos a dejar atrás el entusiasmo que siempre hay por los nuevos dispositivos, aunque personalmente lo veo difícil con todos los rumores sobre gafas de realidad virtual y aumentada que hay en las redes.
Los servicios, durante estos dos próximos años, seguirán tomando más protagonismo. Recordemos que Apple ha adquirido Texture y está preparando un servicio de suscripción a prensa y revistas. Y al mismo tiempo, la compañía también está invirtiendo una gran cantidad de recursos en crear sus propias series y películas. Lo de Apple Music es, definitivamente, sólo el comienzo.
¿Y qué pasará después? Los analistas ya no se atreven a mencionar predicciones con tanto detalle para cosas que van a pasar dentro de más de dos años. Nadie sabe cómo pueden ser los iPhone que veremos en septiembre de 2020, pero para entonces podríamos haber asistido al lanzamiento de un nuevo producto que cambie la estrategia de Apple. De la misma forma que el iPod terminó desbancando al Mac como pilar de ingresos para la compañía y el iPhone hizo lo mismo con el iPod, algo completamente nuevo puede desbancar al iPhone como dispositivo estrella de la compañía.
Depende mucho del enfoque que se le dé a cada lanzamiento, pero a largo plazo sabemos de Apple investigando wearables, esas gafas de realidad virtual y/o aumentada, un servicio de conducción autónoma, catálogos de prensa, series y películas… con el tiempo Apple puede pasar a ser una compañía de servicios más que de hardware. O los accesorios, viendo el éxito de los AirPods, podrían pasar a cobrar más importancia.
Para nada es una mala noticia tener tantos caminos a seguir: basta gestionar bien todos los recursos y tener un buen plan para que el crecimiento de Apple siga como hasta ahora. Y por supuesto, todo eso no significa que el Mac o los iPhone vayan a desaparecer. Tim Cook habló del iPhone X como el iPhone que tiene que definir el concepto de smartphone durante la próxima década.
La clave: hacer procesadores cada vez más potentes y que consuman cada vez menos energía. Apple lleva haciendo eso desde la transición de los procesadores PowerPC a Intel en sus Mac, precisamente porque los PowerPC eran muy potentes pero muy ineficientes cuando se les daba poca energía. Hemos pasado de la carrera de los megahercios a la carrera de cuánta potencia puedes dar con la menor cantidad de voltaje posible.