TecnoXplora» Móviles

VUELVE LA IDEA DE COMBINAR AMBOS MUNDOS, PERO AL REVÉS

El mundo al revés: tablets que quieren ser netbooks

Compañías como Lenovo o Unusual se lanzan al mercado de las tablet que pueden funcionar con periféricos para resucitar una industria que se quedó en prometedora

Modelo Unusual 89WUnusual

Hay momentos en la historia de un sector en el que uno cree tener una idea revolucionaria, se lanza a apostar por ella y poco tiempo después llega una idea mucho más revolucionaria que le fastidia el negocio al primero. Eso es un poco lo que pasó con los netbooks y los ultrabooks

Hace unos años empezaron a florecer en el mercado pequeños ordenadores ultaportátiles, con pantallas de menos de 11 pulgadas, peso muy reducido y que presumían de su portabilidad. Eran ordenadores muy pequeños, pensados no para pensadas tareas (programas exigentes o juegos requeridos de grandes procesadores). Eran los netbooks: listos para conectarse vía bluetooth o WiFi, aunque sin ranura de CD o DVD (todavía útil entonces), con dos o tres puertos USB, ranura para tarjetas flash y puerto de carga. Suficiente.

Poco después, apenas unos meses, llegaron los ultrabook, que eran más de lo mismo pero bastante más delgados. Se decía que iba a ser el sector que haría repuntar la ya muy estancada venta de ordenadores, anclados aún a una mesa o a un portátil de grandes dimensiones y peso.

Y aparecieron las tablet. Cierto es que lo de las tablet no ha sido la revolución que se presumía, al menos si se compara con el 'boom' de los smartphones, pero barrieron por completo a netbook y ultrabook del mercado, solventando varios de sus problemas: eran más ligeras, con mayor pantalla y con un teclado algo más grande, aunque fuera táctil y no físico. Porque esa era la clave del problema de los anteriores: no era cómodo escribir en teclados tan pequeños ni leer en pantallas de ese calibre.

De ordenadores que quieren ser tablets a tablets que quieren ser ordenadores

Han pasado años y ahora parece que el camino vuelve atrás. Las tablet siguen buscando un futuro inmediato que reactive el sector, que bien pueden ser supertablets, bien podría ser otra cosa. Y una de las variantes es el de las tablet que quieren volver a ser ordenadores.

Marcas como Lenovo, HP o la española Unusual están apostando por tablets de estas características, corriendo con Windows 8 y con una pantallas de 8 o 9 pulgadas. Lo 'novedoso' es que, mediante un cable o una docking station, permiten conectarse a periféricos más cómodos para trabajar, como teclados, pantallas y ratones.

La combinación es curiosa: una tablet de ese tamaño es fácil de transportar, y a la vez resulta cómoda para trabajar con periféricos gracias al sistema operativo. Porque sí, buscar una tablet para trabajar depende de los componentes, pero también qué programa corra en sus venas.

Lo que hizo competitivos durante un tiempo a netbooks y ultrabooks no sólo fue la idea de portabilidad, sino también el precio. Este tipo de terminales actuales, las tablets que quieren volver a ser ordenadores, no suelen llegar a los 400 euros por una especie de híbrido funcional: un Photoshop antiguo corre bien, aunque un juego nuevo no.

Hay, claro, excepciones. Lenovo, por ejemplo, apuesta por un tipo de tablet convertible enfocada al mundo empresarial, como el ThinkPad 10. Se trata de un modelo de unos 600 gramos equipado con Intel Quad Core y pantalla de 10,1 pulgadas IPS y una autonomía de batería de hasta diez horas superando esos 400 euros.

Pero en esta guerra renovada el precio cobra importancia. Unusual, que se centra en la gama low cost, tiene en el modelo 89W uno de sus topes de gama a un nada descabellado precio de 200 euros. Tiene, por tanto, algunas buenas características a un precio ajustado: pantalla de 9 pulgadas IPS, procesador Intel Trail Quad-Core, 32 gigas de almacenamiento, 2 de RAM, algo menos peso que el modelo de Lenovo (450 gramos) y una batería de 500 mAh

Puestos a comparar, en precio gana Unusual y en diseño Lenovo, pero la española ofrece un plus: incluye en el pack una funda teclado estilo origami en algo similar a piel, que lleva teclado incorporado que se conecta directamente -no mediante Bluetooth-, lo cual es muy de agradecer para la batería. La sensación, claro, no es la misma que la de tener un iPad por aquello de las calidades (más tosco y básico esto), pero... ¿realmente alguien necesita una máquina tan potente que valga cuatro veces más?

Y, al final, esa es la guerra: los netbook y ultrabook tenían a su favor la portabilidad, pero también el precio ajustado a cambio de las características ajustadas. Para tener máquinas potentes a gran precio no hace falta inventar nada nuevo, porque entre Apple y Microsoft con la Surface han copado el mercado.

Más sobre este tema:

Vídeos

Dos móviles perfectos para exprimir la vuelta al cole