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EL NUEVO TÉRMINO ES HOLE-PUNCH
Samsung y Huawei ya han lanzado smartphones que reservan solo un pequeño redondel para la cámara frontal. El resto de la superficie es pantalla.
A poco más de un año de su estreno, el ‘notch’, esa pestañita que se cuela en la pantalla de algunos smartphones para alojar la cámara frontal y otros sensores, tiene los días contados. Al menos esto es lo que se deduce de la presentación de dos nuevos smartphones, uno de Samsung y el otro de Huawei. Ambos han introducido un elemento de diseño que sustituye al notch: el ‘hole-punch’, un palabro aún más desagradecido.
El hole-punch significa literalmente perforadora de papel. Da nombre a esos instrumentos para hacer agujeros en los folios, de manera que encajaran en un archivador. Aunque también puede ser el agujero que hace esta herramienta de oficina. Y es este el aspecto que tiene a alternativa al notch. Un redondel oscuro que disimula el sensor de la cámara frontal. Es una pequeña isla rodeada de pantalla luminosa.
El notch, que se podía traducir como muesca o marca, era una extensión de los bordes del terminal. Más bien era la rebaba que quedaba después de haber convertido casi toda la superficie frontal en pantalla. Se estrenó con el iPhone X hace poco más de un año y los fabricantes de Android corrieron a imitarlo. Pero ahora las tornas han cambiado.
El nuevo Samsung A8s, que de momento se venderá solamente en China, y el Honor View 20, que tendrá su presentación global en enero pero que ya ha sido exhibido por Huawei, lucen cada uno sus respectivos hole-punch.
La idea, como con el notch, es economizar el espacio. La pantalla es lo importante y se quiere que tenga el máximo protagonismo posible. Pero los terminales ya son demasiado grandes –muchos son difíciles de manejar con una sola mano– con lo que no se puede seguir aumentando su tamaño. Hay que buscar un equilibrio entre ambas necesidades y el medio para alcanzarlo es el diseño. El hole-punch es una alternativa de diseño, que ha optado por aislar a la cámara frontal, de manera que el redondel negro pase desapercibido al ojo que barre la pantalla.
En el caso de los smartphones presentados, el A8s de Samsung tiene un diámetro de 6 milímetros, mientras que el Honor View 20 de Huawei ha reducido el suyo a 4,5 milímetros. Ahora solo estos pequeños botones, aproximadamente del mismo tamaño que los agujeros que se hacían en los folios, estorban a la pantalla.
La cámara en los últimos años se ha convertido en uno de los elementos donde más cambios ha habido en los smartphones, ahora que estos terminales cada vez lucen menos novedades. El aumento en el número de sensores, la guerra por los megapíxeles (el Huawei View 20 y un nuevo dispositivo de Xiaomi contarán con cámaras de 48 megapíxeles) y, ahora, el diseño que envuelve a la cámara frontal aparecen como los caballos de batalla de los fabricantes para diferenciarse de la competencia.