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Móviles
El año pasado Motorola lanzaba dos móviles de una nueva gama denominada “Edge” que presumía sobre todo de una pantalla con doble curva, de ahí ese apellido. Por tanto, cabría pensar que el nuevo Motorola Edge S que se ha presentado hoy debía presumir de la misma pantalla con una curva acusada. Pero lamentablemente nada más lejos de la realidad. Porque finalmente este teléfono llega presumiendo de potencia, pero no de pantalla, al menos en el aspecto estético. Es verdad que la pantalla del Edge era extremadamente curva, lo que en algunas ocasiones penalizaba la visibilidad. En cualquier caso, estamos ante un teléfono de alta gama, de eso no cabe duda.
Características del Motorola Edge S
Como decimos, no obstante, aunque no cuente con la espectacular pantalla de su predecesor, sí que ofrece unas características muy destacadas, y lo mejor de todo, a un precio mucho más ajustado. Este nuevo terminal llega con una pantalla plana, sin bordes curvados, y con un tamaño de 6.7 pulgadas. Esta tiene resolución Full HD+, siendo compatible con HDR10+, lejos de lo que podíamos esperar, tiene una tasa de refresco tradicional de 60Hz. Sin duda la gran novedad viene de la mano del procesador, que acaba de estrenarse en el mercado, y lo hace como un auténtico procesador de gama alta, de buque insignia.
Se trata del Snapdragon 870, que es más potente que el Snapdragon 865+, y queda un peldaño por debajo del Snapdragon 888 que montan ahora los topes de gama de Android. Cuenta con 6GB u 8GB de memoria RAM, así como con 128GB o 256GB de almacenamiento interno, ampliable mediante tarjetas microSD. La cámara de fotos es triple, y cuenta con un sensor principal de 64 megapíxeles, acompañado por un ultra gran angular de 16 megapíxeles y uno de profundidad de 2 megapíxeles. Delante la cámara es dual, contando con un doble agujero frontal en la pantalla, en lugar de la tradicional forma de pastilla.
Estas cámaras son de 16 megapíxeles, y de 8 megapíxeles ultra gran angular. La batería tiene una gran capacidad, siendo de 5000mAh, y contando con una carga rápida de 20W. Un teléfono que, por supuesto llega con conectividad 5G, así como con NFC para pagos móviles, y GPS de doble banda. Además, es compatible con Wifi 6 y Bluetooth 5.1. El lector de huellas se integra en el lateral, en el botón de encendido, es resistente al agua gracias a la certificación IP52, y cuenta con un conector de auriculares mini Jack de 3.5mm. Estrena Android 11, bajo su capa de personalización, que es una de las menos invasivas del mercado. Un teléfono que, a pesar de contar con uno de los procesadores más potentes del mercado en la actualidad, llega a un precio realmente ajustado.
De momento se ha puesto a la venta en China, donde se puede comprar desde los 250 euros al cambio, en su versión de 6GB+128GB. La versión de 8GB+128GB cuesta 300 euros al cambio. Y la versión de 8GB+256GB tiene un precio de 350 euros al cambio. Un teléfono que pierde la pantalla curva, pero que gana mucha potencia y cuesta menos de la mitad.