Astronomía, divulgación, descubrimientos, ecología, innovación...
Redes sociales
Hace unas horas volvían a caerse de manera masiva WhatsApp, Instagram y Facebook. Decimos que es la enésima caída porque sí, cada pocas semanas o meses sufrimos una en numerosas regiones del planeta. Y además ahora lo hacen en grupo, como en esta ocasión, no limitándose el desastre solo a la app de mensajería, que normalmente es la que tiene tanta trascendencia. No es una casualidad que las tres apps y redes sociales se caigan a la vez, y que lo hagan desde que están bajo un mismo paraguas. No cabe duda de que Facebook tiene algo que ver en todo esto.
Facebook, el denominador común tras estas caídas
Fue un ya lejano 7 de octubre de 2014 cuando Facebook compró WhatsApp por 22.000 millones de dólares. Hasta entonces, como tantas otras apps, esta había funcionado de manera independiente y no había presentado especiales problemas de estabilidad a lo largo de su corta trayectoria. Pero la compra por parte de Facebook le unió de manera inevitable al imperio de Zuckerberg, a lo bueno y a lo malo. Y actualmente solo nos acordamos de esto último cada vez que hay una caída masiva.
El problema no es en sí Facebook, sino en lo que comparten tanto Instagram, como WhatsApp con la red social. Hace más o menos un par de años WhatsApp migraba sus servidores y pasaba a integrarse en los de Facebook. También Instagram utiliza estos mismos servidores, por lo que esa puede ser una de las principales razones por las que cuando hay una caída masiva lo hacen las tres apps a la vez. Además desde que se comparten los servidores las caídas de las tres apps y redes sociales a la vez no han hecho más que crecer, hasta convertirse en algo que lejos de sorprender a los usuarios irrita a estos cada vez más.
Marzo de 2019: la caída del servicio más traumática
Fue el día 13 de ese mes cuando se produjo la caída más importante de la historia no solo de WhatsApp, sino también de Instagram y Facebook. Con los servidores en común casi recién estrenados, un cambio en la configuración de estos llevó al caos a las tres aplicaciones y redes sociales, dejando sin servicio a cientos de millones de usuarios en todo el mundo durante nada menos que 12 horas. La caída de hoy ha sido muy limitada comparada con la de entonces, de hecho hoy la incidencia ha durado apenas 20 minutos. Pero esto nos hace recordar lo peligroso que es que una misma empresa acapare los principales servicios de comunicación instantánea del planeta. Ya que ahora la mayoría de problemas se triplican en los tres servicios.
Hace solo unos días la API de identificación de Facebook que hay activa en cientos de apps en el mercado produjo otro fallo masivo que provocó que un gran número de apps dejaran de funcionar, como Tinder o TikTok y no pudieran tan siquiera iniciarse. Sin duda es el momento de ir abriendo una cuenta de usuario en alguna de las principales apps de mensajería del mercado más allá de WhatsApp, como son Telegram o Signal. Es evidente que la pertenencia a Facebook ha hecho más mal que bien a la aplicación de mensajería.