TecnoXplora» Redes Sociales

NUEVAS TECNOLOGÍAS AL SERVICIO DEL TERROR

Terroristas en Twitter: cuando las redes sociales las usan los malos

En los últimos años diversos grupos terroristas vinculados al yihadismo han usado Twitter y YouTube como plataformas para difundir su mensaje. Sus cuentas suelen ser bloqueadas, pero su huella permanece.

Territorio reclamado por el ISIS; a través de TwitterISIS

Cuando hace algo más de una década la gente empezó a conocer qué era Al Qaeda, muchos analistas se fijaron en algo diferencial en su forma de atentar: no se luchaba contra un ejército ni contra un país, sino que eran terroristas deslocalizados que usaban las redes de comunicaciones del mundo occidental para atacar. Por eso se centraron en líneas de metro, aeropuertos o vías del tren. Al Qaeda, que quiere decir 'la base', era una red de financiación y coordinación, y como sucede con la Red digital, su fortaleza residía en que aunque se eliminara una parte de ella, ésta seguiría funcionando.

¿Y qué demonios tiene que ver todo esto con la tecnología? Mucho, porque la evolución de esa forma de operar ha dado el salto de un tipo de red a otra, a internet. De hecho, no es algo nuevo. Los servicios de inteligencia lograron averiguar hace años cómo los terroristas de Al Qaeda usaban Gmail para comunicarse sin que pudieran interceptar sus mensajes, y el procedimiento era de una sencillez abrumadora: uno entraba a la cuenta de correo desde un cibercafé, escribía su mail, lo guardaba en borradores y, a la hora pactada, otro entraba desde cualquier otro lugar y buscaba las instrucciones en la carpeta de mensajes sin enviar. Al no enviarse el mail, no pasaba por los servidores 'pinchados' y resultaba indetectable. Terrorismo en la nube en su versión primigenia.

Ahora los terroristas han dado el salto a algo mucho más 'mainstream', como es el uso de redes sociales para difundir su mensaje. Sus cuentas, dado que reciben muchas denuncias de usuarios, suelen ser rápidamente detectadas y bloqueadas, pero la huella de sus mensajes cala. Por un tiempo tienen una ventana donde difundir sus ideas, sus logros... o sus atrocidades.

Los vídeos con ejecuciones y comunicados en YouTube se han multiplicado a la misma velocidad que las cuentas surgidas por todo el mundo islámico. Desde Hamas en Gaza (bloqueado), hasta Boko Haram en África central (bloqueado), pasando por Al Shabab en Somalia (bloqueado) o Al Qaeda en el Magreb Islámico (bloqueado). Y claro, el grupo terrorista del momento, ISIL en Irak y Siria, también

Pero la cosa ha ido evolucionando en su estilo. Por ejemplo Boko Haram fueron los protagonistas de una muy comentada campaña en Twitter tras secuestrar a doscientas niñas. Tras el hashtag #bringbackourgirls ("traed de vuelta a nuestras niñas"), ciudadanos y líderes de todo el mundo pedían la liberación de unas chicas sobre las que nada se sabe... y ya parece que nadie se acuerda. El éxito de estas campañas tan llamativas para los medios es, sin embargo, muy poco efectivo en el mundo real

De nada valieron tantas caras conocidas, incluida la de la primera dama de EEUU, que secundó la campaña desde Instagram... y obtuvo una respuesta que fue casi tan viral como la campaña en sí. No vino desde Boko Haram, eso sí, sino desde Raza Nadim, del autodenominado Comité de Asuntos Públicos Musulmanes en Reino Unido.

Si uno piensa en terroristas tuiteando seguramente no esperaría técnicas propias de marketing como responder a un viral con otro al estilo Pepsi y Coca-Cola. Pero es que estos terroristas no se comunican como cabría esperar.

Por ejemplo, una de las cuentas mencionadas arriba, la de las Brigadas de Al Qassam, brazo militar de Hamas en Palestina, se dedicaba a 'trollear' todas las publicaciones en Twitter del Ejército israelí. Por cada anuncio de unos, una respuesta de los otros, lo que generaba una curiosa cadena de 'conversaciones' y amenazas entre ambos. El Ejército de Israel que, por cierto, desarrolló durante años una curiosa campaña de gamificación en su página web para promover su imagen entre los ciudadanos como si de un juego se tratase, con medallas y premios. La contienda digital acabó con la cuenta de los palestinos cerrada.

Lo que sucede es que, ahora que Twitter ha tomado la política de cerrar casi inmediatamente cada una de esas cuentas de grupos terroristas conforme van despuntando entre los usuarios, los miembros y simpatizantes de estas han atomizado su contenido ¿No queda ya cuenta activa oficial del ISIS abierta? No pasa nada, sus fieles abren decenas de cuentas y tuitean, volviendo a la idea inicial de la red. Incluso generando debates acerca de si es conveniente su censura.

Y, además, lo hacen con técnicas típicas de cualquier marketiniano: tono cercano, hashtags... ¡y hasta gatitos! No, no es broma. Y entre chascarrillos, también hay propaganda, claro. A fin de cuentas, todo buen marketiniano intenta hacer una cuenta atractiva... para hacer llegar su mensaje

Más sobre este tema: