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TRAS LA VICTORIA DEL REPUBLICANO
Trump ha ganado las elecciones de Estados Unidos contra todo pronóstico, y eso significa no sólo tener acceso a los códigos nucleares o al ejército más poderoso del planeta, sino también a las redes sociales que durante el mandato de Barack Obama han crecido de una manera espectacular.
A estas alturas de la película en la que se ha metido Estados Unidos no se puede negar lo evidente: Obama ha sido el presidente del social media. El primer presidente estadounidense en hacer una emisión en directo en Facebook, el primero en tener una cuenta en Twitter (@POTUS) o el primero en usar los filtros de Snapchat.
Pero todo eso pasó ya a la historia, y esas cuentas ahora pertenecen a Donald Trump, el magnate convertido a presidente de los Estados Unidos. Así será la transición de todas las redes sociales, según la Casa Blanca.
1.- En Twitter: la cuenta oficial que ha venido usando Obama hasta ahora pasará a estar vacía en los próximos días. El equipo del gobierno saliente pasará todos los mensajes a la cuenta @POTUS44, cuyo número, el 44, significa el número de presidente que ha sido Obama en la historia de los Estados Unidos. A partir de la toma de posesión, @POTUS será de Trump. Lo mismo pasará con otras cuentas gubernamentales como @WhiteHouse, @FLOTUS o @PressSec.
2.- En Facebook e Instagram: misma estrategia que en Twitter. La Casa Blanca ha anunciado que mantendrán los nombres y las URL de ambas redes sociales, pero llevarán todo el contenido a un archivo al que se podrá acceder mediante @ObamaWhiteHouse y fb.com/ObamaWhiteHouse. Las cuentas oficiales quedarán así vacías y listas para que Trump y su equipo le den uso.
3.- Web “We The People”: en esta página web la administración de Obama recogía peticiones populares que, cuando alcanzaban las 100.000 firmas, eran respondidas por su equipo. Según informan en un comunicado desde la Casa Blanca, dejarán la web operativa, ya que es ‘Open Source’, y esperan que la siguiente administración también haga uso de ella.
4.- Fotos y vídeos: todo este contenido que ha sido generado durante ocho años seguirá el mismo proceso que las cuentas de Facebook o Instagram. Será migrado, se cambiarán las URL en las que están actualmente y dejarán un vacío disponible para Trump y los suyos.
Sin duda un gran trabajo de ingeniería de redes sociales para garantizar que el equipo de gobierno entrante en los Estados Unidos no se encuentra nada de su antecesor. Ahora sólo queda saber cuál será el uso que hará Trump de todas estas redes sociales.