Consejos viajeros y económicos
¿Quieres ahorrar para poder viajar a ese lugar que llevas esperando mucho tiempo o porque te apetece permitirte, de vez en cuando, alguna que otra escapada? Te dejamos un par de consejos que puede ayudarte en este sentido.
Es muy complicado ahorrar, somos conscientes de ello. En primer lugar, porque es difícil saber de antemano qué imprevistos van a atacarte cada mes y en cuál de ellos vas a tener que descargar un presupuesto grande con el que no contabas. Y porque la vida, como suele decirse, es muy cara. Teniendo en cuenta todo esto, lo único que podemos ofrecer son una serie de consejos para aquellos que siempre buscan, como nosotros mismos hacemos, trucos que permitan ir ahorrando poquito a poquito, día a día, una cantidad de dinero suficiente que nos permita realizar el siguiente viaje.
Por empezar por algún lado, realizaremos la siguiente pregunta: ¿en qué inviertes tu tiempo libre? Seguramente, diversas salidas, cañeos y cenas de amigos estén incluidas en la respuesta. Y no tienes que quitarte de ello, ni mucho menos, pero es cierto que si queremos ahorrar con este buen propósito de viajar tenemos que empezar a ser un poquito más selectivos. Ahorrarnos esa última caña o ese postre que nos apetece pero que no necesitamos.
Poco tenemos que decir de los caprichos. Todos tenemos caprichos, y es lógico viniendo de una sociedad consumista como la nuestra. Si además vives en una ciudad de considerable tamaño, cada día serás atacado no solo por esos imprevistos mencionados sino también por escaparates que te muestran esa cazadora de temporada tan bonita o el último best-seller del New York Times. Se acabaron los caprichos, al menos una buena parte de ellos. Tu dinero tiene otro destino.
Y como es fácil olvidar esto, vamos a darte uno de los mejores consejos que se le puede dar a alguien con estas intenciones. Imprime una fotografía del lugar o los lugares que quieres visitar en los próximos meses, esos por los que estás ahorrando, y guárdala en tu cartera, donde la tengas bien a mano. Donde puedas verla muy a menudo; tan a menudo como necesites sacar dinero de ella. Es la mejor manera de recordarte a ti mismo que estás haciendo un esfuerzo que quizá tarde en ser recompensado pero que, desde luego, merece la pena.
Entramos en un terreno complicado con lo siguiente, pero vamos a abordarlo. Hay quien encuentra muy útil hacerse una especie de presupuesto semanal; es decir, siendo consciente del dinero del qué se dispondrá ese mes, se deja a un lado una pequeña cantidad por si surgiera algo y se divide lo restante entre las semanas del mes. Lo que nos queda, es nuestro presupuesto semanal. Es una buena manera de no gastar más de la cuenta, y es una buena manera también de ir ahorrando lo que nos sobra cada semana, porque tenemos la seguridad de que contaremos con el mismo dinero para la siguiente. ¿Qué os parece?
Por último, un truco cada vez más extendido y efectivo: guarda todas las monedas de 2€. No las gastes nunca, (casi) bajo ningún concepto. Guárdalas en una hucha especial, en la que solo haya monedas de 2 euros. Parece una tontería, pero es probable que a finales de mes te lleves una sorpresa.