Viajar solo puede ser un placer
Si eres de esas personas que siempre tiene ganas de viajar, además del tiempo y dinero suficiente para ello pero nunca encuentra con quien... ¿Por qué no pruebas a realizar un viaje en solitario? Antes de empezar con este articulo, te aseguramos que puede ser una de las mejores experiencias de tu vida y no te arrepentirás de ello...
Incluso las personas más valientes tienen muchos miedos. Enfrentarse a ellos es una tarea personal que a veces cuesta mucho trabajo pero que como muchas veces habremos oído, las mejores cosas las encontramos después de superar las barreras que han crecido como consecuencia de nuestros temores. El miedo a viajar en solitario es algo muy común. Muchas veces nos quedamos sin realizar un viaje porque no encontramos a nadie que quiera acompañarnos y nos quedamos con las ganas.
Ya no es el simple hecho de tener miedo a recorrer kilómetros sin otra persona que nos de ese voto de confianza que necesitamos, sino también el pensamiento del “qué dirá” mi entorno cuando sepa que el viaje lo realizaré sin nadie más a mi lado. Lo primero que tenemos que hacer si en nuestra cabeza ya tenemos la idea de emprender el viaje, es informarnos acerca del destino al que queremos ir. Siendo esta la primera que no contaremos con la compañía de alguien más, lo mejor es escoger un destino seguro y planear el recorrido que queremos realizar, teniendo en cuenta no solo la ciudad o ciudades que visitaremos, sino también la cultura, la gastronomía y la sociedad que nos encontraremos.
También puede ser una buena idea realizar todas las reservas necesarias (alojamiento, viajes o excursiones en el destino elegido...) antes de partir. Así desaparece el miedo de llegar allí y no saber por donde empezar, y además en el caso de que el viaje no se llevara a cabo por alguna circunstancia, hay muchas páginas de reservas online que cuentan con la opción de cancelación gratuita. A la hora de contárselo a tu entorno más cercano, es muy probable que no les guste la idea ya que sentirán preocupación porque algo pueda ir mal.
Por ello debes informarles todo lo posible acerca de los planes que tienes pensados, para así demostrarles que todo está bajo control y no tiene porqué surgir ningún problema. Viajar en solitario tiene cosas muy positivas puesto que te proporcionará más conocimientos sobre el lugar al que vas y sus gentes, ya que es muy probable que el contacto con los habitantes nativos sea mayor. Además, es una manera de descubrirte más a ti mismo y ver hasta donde eres capaz de llegar en diferentes situaciones.
Debes ser siempre prudente y tener el sentido común activado en todo momento, para que las cosas vayan sobre ruedas. Como último consejo, leer historias de otros viajeros pueden ayudarte y motivarte mucho, ya que te enseñan cómo realmente salir de la zona de confort es algo maravilloso, como por ejemplo la historia de Tomislav Perko, un joven croata que se recorrió Europa haciendo dedo; o libros como “Yoga a la sicialana”, que te inspira a vencer tus inquietudes.