ANIVERSARIO
Durante estos 15 años, la línea de AVE Madrid-Barcelona ha doblado el número de pasajeros que transporta cada año -hasta los 12,1 millones de 2022, un 112 % más que en el arranque de la ruta.
El AVE entre Barcelona y Madrid cumple este lunes 15 años desde su primer viaje, un periodo durante el cual este corredor ferroviario ha doblado el número de pasajeros que transporta cada año -hasta los 12,1 millones de 2022, un 112 % más que en el arranque de la ruta- y ha sumado un 51,7 % más de trayectos -hasta los 27.920 del año pasado-.
Barcelona ansiaba desde hacía años la conexión en alta velocidad con la capital española -la primera fecha anunciada fue 2004-, dado que desde 2003 el AVE ya conectaba Madrid con Lleida y Zaragoza y desde 2006 con Tarragona.
El primer servicio de AVE se remonta a 1992 y enlazó Madrid con Sevilla, y desde ese momento ya se abrió un debate acerca de cuándo se acabarían conectando en alta velocidad las dos principales ciudades españolas.
Durante esta década y media, el AVE con origen o destino Barcelona -con conexión directa a Madrid, pero también con posibilidad de paradas en Lleida, Zaragoza y Tarragona- ha sido usado por más de 140,6 millones de personas, y este servicio de alta velocidad de Renfe ha representado una alternativa relevante frente al puente aéreo que conecta Madrid con la capital catalana.
Competencia para el avión
El 20 de febrero de 2008 tuvo lugar el primer trayecto de AVE desde la capital catalana, en ese caso con destino Madrid. El tren partió a las 6.00 horas de la Estación de Sants, al mismo tiempo que otro salía desde Atocha en dirección opuesta. El primero llegó con ocho minutos de adelanto sobre el horario previsto y el segundo con cinco.
El AVE que salió desde Barcelona congregó a 250 pasajeros, si bien casi un centenar de ellos eran periodistas convocados para dar testigo del histórico momento. De ese día también se recuerdan la ilusión y la satisfacción de los viajeros, que entonces comenzaban a usar los teléfonos móviles para inmortalizar ocasiones como esta.
La mayoría de pasajeros consultados ese miércoles de febrero de 2008 por EFE se subieron al primer AVE por asuntos de negocios, y muchos se sorprendieron por la comodidad de este tren frente al recurrente puente aéreo. El punto de inflexión llegó en 2012, año en el que por primera vez el AVE fue más usado que el avión en la conexión entre ambas capitales, una tendencia cada vez más al alza.
En aquel momento, el trayecto entre Barcelona y Madrid se cubría en un mínimo de 2 horas y 38 minutos; ahora el viaje es ocho minutos más corto. En 2008, los trenes con Madrid por sentido y día eran 17; hoy son 27.
Más servicios de alta velocidad
El AVE entre Barcelona y Madrid fue el primer servicio de Renfe de alta velocidad que albergó la capital catalana, pero en los siguientes años estos servicios se multiplicaron.
En 2008 comenzó a operar el Avant con Tarragona y Lleida; en 2009 circuló el primer AVE que conectaba Cataluña con Andalucía sin parar en Madrid; el Alvia hacia el norte y noroeste de España también comenzó a funcionar en 2009; en 2013 tuvieron lugar los primeros viajes en AVE y Avant con Girona y Figueres Vilafant; y ya en 2021 entró en funcionamiento el Avlo, una suerte de AVE de bajo coste, pensado más para un público joven y que viaja por ocio que no por cuestiones de negocios.
Precisamente en mayo de 2021 los servicios de alta velocidad de Renfe compartieron vías por primera vez con el de otras empresas privadas, pues entró en vigor la liberalización del servicio.
Primero comenzó a operar Ouigo, filial francesa de bajo coste de la francesa SNCF, y más tarde entró en escena Iryo, operador participado por la compañía valenciana Air Nostrum y la italiana Trenitalia.