ALBACETE
La cueva de la Camareta es una de las más espectaculares que podemos encontrar en Castilla-La Mancha.
No es ningún secreto que España cuenta con una gran riqueza tanto cultural como histórica, así como patrimonial. Cada rincón de este país tiene algo con lo que sorprendernos y dejarnos sin palabras. Eso es exactamente lo que ocurre con la conocida como Cueva de la Camareta.
Está situada en la provincia de Albacete, concretamente en Agramón y cercano al embalse de “Las Camarillas”. Estamos hablando, por tanto, del municipio de Hellín. Lo cierto es que la Cueva de la Camareta está en un punto que estuvo muy transitado en la antigüedad. Tanto es así que no muy lejos de ese lugar encontramos algunos yacimientos ibéricos verdaderamente importantes.
Un claro ejemplo lo encontramos en el Tolmo de Minateda, o el de Coimbra del Barranco Ancho. Este último situado en la provincia de Murcia. Desde la época ibérica hasta la actualidad, esta cueva se ha convertido en un sitio de lo más frecuentado. De ahí que encontremos en ella un gran número de inscripciones.
Esta cueva está compuesta por nada más y nada menos que cuatro salas, tres de ellas completamente talladas en la roca. Por lo tanto, la mayor parte de lo que conocemos en la actualidad ha sido el resultado directo de la intervención de la mano del hombre. Parece que su origen fue natural, aunque con el paso del tiempo se fue excavando en diferentes periodos hasta contar con las salas que tiene en la actualidad.
En cuanto a las mencionadas inscripciones, podemos encontrarlas en todas las salas. Además, muchas de ellas están perfectamente acompañadas por diversas marcas, así como dibujos. Por lo tanto, es más que evidente que la cueva de la Camareta es nada más y nada menos que un testimonio vivo del paso del tiempo, de muchas personas y grupos de gentes que dejaron su huella en ella.
Testimonios escritos y dibujos que dejan claro que esta cueva es mucho más que eso, y que fue y sigue siendo importante en la historia de la Península Ibérica. Lo cierto es que estamos ante un lugar de lo más especial, en todos los sentidos, que merece la pena visitar al menos una vez en la vida.