País Vasco
El Castillo de Butrón es una de las grandes joyas que podemos encontrar cerca de la ciudad de Bilbao. Podremos viajar, en segundos, a la Edad Media.
En España podemos descubrir, constantemente, un gran número de monumentos que cuentan con un espectacular valor tanto histórico como cultural. Todos ellos pueden llegar a ofrecernos una grandísima experiencia, con la que poder trasladarnos de manera directa a otra época de la historia. Un claro ejemplo lo vemos, sin duda, en el conocido como Castillo de Butrón.
Esta edificación es medieval y, además, cuenta con un estilo neogótico de lo más espectacular. Este castillo de Butrón está situado en el término de Gatika, bastante cerca de la ciudad vasca de Bilbao. Además, también está próximo a otras conocidas poblaciones como es el caso de San Juan de Gaztelugatxe.
Este castillo, que es realmente precioso, nos hace viajar de manera directa a la Edad Media. Esta edificación se puede encontrar en la parte más alta de una colina, sobre unas rocas. Por si fuera poco, este castillo de Butrón está perfectamente rodeado de un bosque de carácter centenario.
Eso sí, para descubrirlo en su totalidad, debemos descubrir su historia. Tenemos que tener en cuenta que, a mediados del siglo XIII, no tenía una función de castillo como tal. En realidad, era una de las prestigiosas residencias de los conocidos señores de Butrón. Era algo así como lo que conocemos como una casa-torre.
Tenemos que viajar al siguiente siglo, puesto que en ese momento el V Señor de Butrón decidió dar un gran giro radical a esta edificación: La transformó en un espectacular castillo. De esta manera, durante centenas de años, el Castillo de Butrón se ha convertido en gran testigo de un gran número de batallas protagonizadas por diversos bandos de la prestigiosa nobleza de Bizkaia.
A principios del siglo XVI, cuando terminaron esta serie de batallas, este Castillo de Butrón quedó completamente deteriorado y abandonado. Eso sí, tenemos que tener en cuenta que varios siglos después, concretamente en el XIX (año 1878), se decidió reconstruir, bajo el mando del arquitecto Francisco de Cubas. Esta acción hace que encontremos, como resultado, el castillo que conocemos en la actualidad.
Bien es cierto que el castillo, aunque suponga una experiencia de lo más espectacular a nivel histórico y cultural, tan solo se puede ver desde el exterior. ¿La razón? Está abandonado. Aun así, es muy recomendable acercarse a las inmediaciones para sentir que, por unos instantes, formas parte de la Edad Media. Es un lugar idóneo para visitar en familia, con los más pequeños de la casa, pero también para los amantes de la fotografía ya que podrán hacer instantáneas realmente mágicas y de ensueño.