Islas Canarias
El Elevador de Aguas de Gordejuela es uno de los edificios en ruinas más espectaculares tanto de las Islas Canarias como del resto de España. ¡No te dejará indiferente!
Es hora de descubrir el Elevador de Aguas de Gordejuela, conocido también como “Casa Hamilton”. Lo podemos encontrar cerca de Los Realejos, en Tenerife. En su día se trataba de una instalación industrial, construida a su vez sobre la antigua ubicación del molino de Juan de Gordejuela. De ahí el nombre tan curioso.
La construcción se llevó a cabo en 1903 gracias a la conocida Casa Hamilton. Se trata de una empresa británica que no dudó un solo segundo en hacerse con las acciones de la sociedad de aguas de Gordejuela. Por tanto, las obras tenían como objetivo algo muy concreto: Elevar el agua hasta la cima del acantilado, que estaba a unos 200 metros sobre el nivel del mar aproximadamente.
Cabe destacar que la instalación se llevó a cabo por el ingeniero militar José Galván Balaguer. A su vez, forma parte de la Lista del Patrimonio Rojo cuyo objetivo es recoger aquellos elementos del Patrimonio Cultural de España que lleguen a estar en riesgo de desaparición. Por lo tanto o se da a conocer o se pasa a restaurar y consolidar.
Ahora bien, ¿por qué llegó a abandonarse el Elevador de Aguas de Gordejuela? Debemos tener en cuenta que en esta instalación se decidió implantar la primera máquina de vapor de toda la isla de Tenerife. Esto fue verdaderamente importante a principios del siglo XX, puesto que conseguía elevar esa agua hasta el mismo valle de la Orotava.
A pesar de la genialidad de la idea, la Casa Hamilton rápidamente tuvo pérdidas por lo que intentó vender esa parte del agua a otras áreas de la isla. Los gobernantes no quisieron escuchar estas propuestas, por lo que este Elevador llegó estar primero en manos de la empresa Fyffes y, posteriormente, pasó a ser de dominio público.
La decadencia es evidente y se debe a que el sistema de elevación del agua rápidamente se quedó obsoleto. Tampoco debemos olvidar el progresivo abandono que experimentó la agricultura. Todo ello se sumó a que el proceso era excesivamente caro y, por si fuera poco, las aguas perdían mucha calidad.
En la actualidad, el Elevador de Aguas de Gordejuela se encuentra en ruinas. De hecho, se puede ver cómo la estación de bombeo se encuentra sin techo, puertas o ventanas. Algunos de sus tantos arcos han desaparecido, mientras que también se produjo el mismo hundimiento del suelo. A pesar de ser un lugar abandonado, estamos ante uno de los más impresionantes de todo el país. Y es que la imagen del edificio en ruinas junto al acantilado nos ofrece una de las imágenes más fotografiables de la isla. ¡Sin lugar a dudas!