TE LO CONTAMOS

Un pasajero de Ryanair es obligado a pagar por una maleta que cumplía las medidas y le dieron agua del lavabo durante el vuelo

Un pasajero que se dirigía de Palma de Mallorca a Manchester se ha visto obligado a pagar por una maleta de mano que ya tenía pagada y ha contado que a otro pasajero "le dieron agua del lavabo" durante el vuelo.

Recientemente te contábamos que Consumo había multado con 150 millones de euros a Ryanair, easyJet, Vueling y Volotea por los cobros en el equipaje de mano, entre otras cosas. Y ahora te contamos la experiencia de un pasajero que volaba entre Palma de Mallorca y Manchester.

Al parecer, tal y como cuenta el medio Mirror, la pareja tuvo que pagar 140 euros por dos maletas por las que ya habían pagado anteriormente. Una vez en el aeropuerto de Palma, la pareja fue comunicada de que sus maletas no cumplían las medidas y no podían subir al avión.

Interior de un avión de Ryanair | iStock

Dos maletas de mano por las que ya habían pagado y que, además, ya habían pasado los controles de medidas de la misma aerolínea en el viaje de ida pero, al parecer, esas mismas maletas no servían para la vuelta. Los trabajadores de Ryanair informaron a los dos viajeros que o pagaban los 70 euros por cada maleta o se quedaban en tierra.

"Dado que el vuelo estaba cerrando en ese momento, no teníamos otra opción que entregarles una tarjeta de débito y pagar 140,00 €. Nunca me había sentido tan intimidado. Nos arruinó el día", dijo David, uno de los dos pasajeros afectados.

Maleta de mano en la cabina del avión | iStock

"Estos pasajeros reservaron una tarifa prioritaria para este vuelo de Palma a Manchester (24 de mayo), lo que les permitió a cada uno de ellos llevar a bordo un pequeño bolso personal y un equipaje de mano de 10 kg. Como sus maletas de cabina excedían el tamaño permitido, el agente externo de la puerta de embarque del aeropuerto de Palma les cobró correctamente una tarifa estándar de equipaje en puerta de 69,99 € para colocar sus maletas de gran tamaño en la bodega", dijo por su parte una portavoz de Ryanair y que recoge el medio mencionado.

Además, durante el vuelo, David dice que "la tripulación anunció que no había carritos a bordo, lo que significaba que durante el vuelo no habría comida, bebida ni siquiera agua. David incluso mencionó cómo a un pasajero, que sufría dolor de cabeza, le dieron agua del lavabo de uno de los baños del avión".