Para chuparse los dedos
El queso es un alimento sagrado para muchos y directamente prohibido para otros, que no terminan de relacionarlo con un sabor agradable. Pero este artículo va dedicado a los primeros. Es el momento de descubrir cuáles son los quesos más ricos del mundo.
Es curioso cómo cambian los gustos de una persona a otra e, incluso, de una cultura a otra. Quizá es por la costumbre, pero muchas veces lo que nosotros consideramos una delicia gastronómica, para otros es directamente incomible. Y este es un fenómeno que se da también con alimentos que encontramos en todo el planeta, como por ejemplo el queso. De hecho, quizá el queso sea el que mejor represente esta curiosa situación, ya que parece que no existe un término medio: o lo amas o lo odias.
Además, también es uno de esos alimentos de los que encontramos numerosas y muy diferentes variaciones dependiendo de la zona del mundo en la que nos hallemos. En esta ocasión, hemos querido dedicarle este artículo a todos esos enamorados del queso que serían capaces de dar la vuelta al mundo para probar los más sabrosos. Y eso es precisamente lo que vamos a descubriros, los quesos más ricos de nuestro planeta. ¡Se nos hace la boca agua!
Brie
Antes de que se forme un debate, no es que el Brie sea el mejor de todo el planeta, sino que los hemos colocado por estricto orden alfabético; no podemos elegir entre unos y otros. Eso sí, no nos olvidamos que este queso es conocido como ‘el rey de los quesos’, un sobrenombre que se ha ganado por su increíble sabor y por el enorme número de admiradores que tiene. Es originario de la región francesa de Brie, que le da su nombre.
Cheddar
Nos vamos ahora a otro rincón de Europa, bastante cercano a Francia: Inglaterra. Allí fue precisamente donde nació el queso Cheddar, uno de los más internacionales de la actualidad. Además, igual que ocurría con el anterior, es uno de los más alabados por los amantes de este alimento y se usa para diferentes elaboraciones en cocina.
Chhurpi
Sí, existe un queso con este nombre y, además, está delicioso. De hecho, aquellos afortunados que hayan podido visitar Nepal y El Tíbet, lo conocerán a la perfección, ya que es típico de esta zona. Existen dos variantes, dos tipos de queso Chhurpi, una más suave, elaborada con leche de vaca, y otra más fuerte, con leche de yak. Es tan típico que suele comerse diariamente, junto con arroz.
Cabrales
Los quesos españoles no pueden faltar en nuestra lista. El primero que hemos querido destacar es, por supuesto, el queso Cabrales, uno de los que mejor representan el amor/odio hacia este alimento. Es elaborado en la zona de Asturias de manera artesanal y está compuesto por una mezcla de leches de vaca, cabra y oveja. Al ser madurado en cuevas, la humedad provoca que aparezca el moho Penicillium, es decir, ese color azul verdoso que lo caracteriza. Su sabor y su olor son bastante fuertes.
Emmental
En Suiza no sólo son famosos por su chocolate, sino también por su queso. Uno de los más sabrosos y conocidos es el Emmental, que surge en los cantones (sus ‘comunidades autónomas’) más centrales del país. Se elabora con leche de vaca y, pese a que su olor puede resultar algo fuerte para algunas personas, es uno de los quesos que más gusta alrededor del mundo, ya que su sabor es suave y agradable.
Feta
Poco a poco, este queso griego se ha ido abriendo paso alrededor del mundo y ha terminado convirtiéndose en uno de los más populares del momento. Esta compuesto de una mezcla de leche de cabra y leche de oveja y es producido en Macedonia, Tracia, Tesalia, Grecia central continental, el Peloponeso y Lesbos. Es perfecto para ensaladas, pero su rico sabor hace que sea ideal para cualquier plato.
Gorgonzola
¿Cómo íbamos a olvidarnos de los quesos italianos? Este país es conocido por su pasta, por su pizza y por sus helados, pero también, por supuesto, por las diferentes variaciones de este alimento. Uno de los más admirados es el Gorgonzola, típico de las zonas del Piamonte y Lombardía y caracterizado por su olor, que deja un ligero aroma a nuez. El propio Gorgonzola tiene diferentes variantes, desde más suave a más fuerte.
Gouda
Generalmente, cuando pensamos en queso nos vienen a la cabeza Italia, Francia, Suiza… Sin embargo, Holanda también nos ha regalado algunos de nuestros favoritos, como el conocido Gouda. Comenzó a producirse en el siglo XVII y está hecho con leche de vaca. Igual que ocurría con el Emmental, su sabor hace que sea uno de los más aceptados por todos los paladares, aunque también hay variantes.
Gruyère
La imagen clásica del queso con grandes agujeros, esa que tantas veces ha aparecido, por ejemplo, en películas de dibujos animados, no es otra que la del queso Gruyère, procedente de Suiza, concretamente de un pueblo homónimo. Su sabor es uno de los más complicados, ya que va pasando de frutal a un sabor similar al de la nuez, lo que hace que comerlo sea toda una experiencia.
Manchego
Regresamos a nuestro país para hablar del que quizá sea nuestro queso más admirado, con permiso del resto. El queso Manchego ha enamorado paladares de todo el mundo desde hace años, y no nos extraña. Como su propio nombre indica, es producido en Castilla La Mancha y está hecho con leche de oveja. A diferencia de otros, la corteza de este queso es comestible, algo que no todo el mundo conoce. Su sabor puede ser suave o fuerte, dependiendo de la variedad.
Mascarpone
El Mascarpone es uno de los quesos italianos más ‘diferentes’, por así decirlo, y de los más utilizados en, por ejemplo, repostería. Igual que el Gorgonzola, también es originario de Lombardía, y se trata de un queso de pasta blanda, con una textura prácticamente cremosa. Aunque se puede combinar con productos salados, como las anchoas, es conocido por ser uno de los principales ingredientes del riquísimo tiramisú.
Monterey Jack
Ha tardado en aparecer, pero Estados Unidos también puede presumir de tener ricos quesos, como es el caso del Monterey Jack. Comenzó a fabricarse en monasterios franciscanos de Monterey, en California, pero actualmente se ha extendido. Puede ser confundido con el Cheddar, ya que tienen una textura y un sabor similar, pero si los comparas diferenciarás sus esencias. Su sabor es de los más suaves.
Mozzarella
Seguimos con Italia y con sus platos típicos. La pizza es uno de ellos y, por tanto, junto a ella nos encontramos la Mozzarella. Este también es un queso bastante curioso, ya que se elabora con leche de búfalos. Al contrario que el resto, se suele consumir fresco y no envejecido, y además de servir como base perfecta para las ya mencionadas pizzas es riquísimo para ensaladas y otros platos ligeros.
Parmesano
Por último, en el caso de Italia, y no por ello menos importante, nos encontramos el Parmesano, el que quizá sea el queso italiano más admirado a nivel internacional. Se produce en regiones como Parma, Reggio Emilia, Módena, Bolonia y Mantua, y se hace con leche de vaca. Tiene un olor y un sabor bastante fuertes, pero muy agradables, y además es perfecto para acompañar a platos de pasta.
Roquefort
Seguro que estabas esperando la llegada del queso Roquefort, con el que ocurre algo similar a lo que pasa con el Cabrales, que es la viva imagen del amor/odio por el queso. Procedente de Francia, es uno de los más populares del país, muy admirado entre las clases altas. Es un queso con un sabor bastante fuerte y salado, no apto para todos los paladares.
Tetilla
Son muchos los quesos de nuestro país que podríamos destacar en esta lista, pero el último del que vamos hablar es el queso de Tetilla. Como bien sabrás, es típico de Galicia, aunque a estas alturas ya se ha extendido por todo el país. El nombre viene dado por su forma, bastante curiosa, que destaca junto con la cremosidad del queso y, por supuesto, su riquísimo sabor ahumado.
Tulum
Para terminar, viajamos hasta Turquía, uno de los países más exóticos y bellos de nuestro planeta. Allí tendremos la oportunidad de degustar el queso Tulum, elaborado con leche cruda de oveja. Existen numerosas variedades de este queso, las cuales permiten que sea adorado por aquellos que se consideran amantes de los sabores fuertes y también por quienes apuestan más por los suaves.