EN LANZAROTE

El restaurante español que National Geographic ha elegido como uno de los más impresionantes del mundo para comer

National Geographic ha escogido a un restaurante de Lanzarote, en las Islas Canarias, como uno de los seis lugares más impresionantes del mundo para disfrutar de una buena comida. Un espectacular enclave donde gastronomía y naturaleza se mezclan ofreciendo una exquisita combinación. ¡Te contamos cuál es!

Restaurante El Diablo en LanzaroteiStock

Si hace unas semanas hablábamos de que Corral de la Morería, un restaurante y tablao flamenco de Madrid, había sido incluido en la lista del New York Times como visita imprescindible si viajas a la capital, este miércoles 12 de abril os contamos que el restaurante El Diablo, situado en Lanzarote (Islas Canarias), ha sido seleccionado por National Geographic como uno de los seis lugares más impresionantes del mundo para comer.

Como señala la prestigiosa revista, su comida "se cocina con vapor sobrecalentado que se escapa de un volcán activo en el Parque Nacional de Timanfaya" al que le rodea "un paisaje volcánico desolado que fácilmente podría parecerse al planeta Marte".

Sin embargo, no fue "hasta que las autoridades del parque crearon un centro de visitantes, rutas de senderismo, una ruta de turismo en automóvil y el restaurante en la cima de la montaña" que la zona dejó de considerarse "un páramo estéril".

Restaurante El Diablo en Lanzarote | Mariam Armiñana

Según indican, la parrilla al aire libre del citado restaurante circular fue construida con piedra de basalto arrojada por las erupciones volcánicas y asa tanto carnes como mariscos. Sin embargo, lejos de estas delicias, también ofrece algunos de los platos favoritos de la isla como las 'papas arrugadas' con salsa mojo.

La parrilla al aire libre del restaurante El Diablo | Mariam Armiñana

Pese a su ubicación, disfrutar del lugar donde la gastronomía y la naturaleza se fusionan para crear una experiencia inolvidable "es fácil" a través de la autopista 67 desde cualquier otro lugar de la isla: "El aparcamiento está justo afuera y solo hay un corto paseo cuesta arriba", explica National Geographic.