MADEIRA
Se trata de una bahía preciosa con olor a pescado y muchos rincones por ver.
Madeira es un destino fantástico para visitar durante todo el año. Tiene un clima cálido, con temperaturas agradables en invierno, por eso es un lugar excelente en cualquier época. Así, puede que te estés planteando visitar la isla próximamente. O puede que este rincón portugués te apetezca un poco más adelante. Sea como sea, queremos aconsejarte que durante tu viaje visites Câmara de Lobos, una pequeña aldea marinera de lo más irresistible.
Bañada por el océano Atlántico, esta pequeña villa se sitúa en la zona centro oeste de la isla de Madeira, y sin duda parece sacada de una postal. Por eso no es de extrañar que sus habitantes convivan a diario con turistas que llegan atraídos por sus encantos. Por sus pequeñas callejuelas con olor a salitre y sus aguas salpicadas de barcas de colores. Pero también por su animación nocturna, pues se trata de una preciosa bahía con muchos bares y restaurantes.
Así, además de sacar fotografías sin parar, en Câmara de Lobos puedes aprovechar para degustar algunos de los platos típicos de Madeira. Podrás deleitar a tu paladar con un vaso poncha o con un plato de Gata, un bacalao que secan allí mismo y cuyo olor se expande por toda la localidad. O quizá prefieras darle la oportunidad a la sopa de castaña, el pez espada negro o al Bolo de Mel.
Con el estómago ya lleno, puedes aprovechar la visita para contemplar las vistas de alrededor, pues este municipio cercano a la capital Funchal está rodeado de viñedos y plataneros. Hay muchísimos y, hablando de cosas que abundan, te diremos algo que ya no hay pero que sí hubo en el pasado. En tal cantidad, además, que sirvió para darle nombre al pueblo: focas monje.
Câmara de Lobos es uno de los rincones más antiguos de Madeira y, en sus orígenes, sirvió como hogar para multitud de focas monje. A estos animales, en portugués, se les llama lobos marinos. De ahí que el pueblo sea conocido como Câmara de Lobos. Hoy ya no se pueden ver estos animales (aunque sí un monumento en su recuerdo), pero sus atractivos de igual modo son tantos que te aseguramos que no te lo querrás perder.