CATEDRALES
Viajamos hasta Gloucester para conocer qué hay detrás de su Catedral y por qué la visitan tantos seguidores de Harry Potter.
Es el momento más que perfecto para poner rumbo a Inglaterra, concretamente a Gloucester. Allí encontramos un gran número de monumentos, rincones y edificaciones que no dejan absolutamente indiferente a nadie. Un claro ejemplo es precisamente, su catedral.
Se trata de un templo que ha sido construido a lo largo de un gran número de siglos. En él, encontramos diversos elementos románicos, pero también de arquitectura gótica y del conocido como estilo Tudor. Sin duda, nada más entrar, llama poderosamente la atención por su enorme belleza.
Debemos tener en cuenta que en esta espectacular Catedral de Gloucester se ha rendido culto durante más de 1300 años. En este mismo lugar, antiguamente, había un monasterio que fue fundado por Osric de Hwicce, conocido como príncipe de Mercia, allá por el año 679. Esa comunidad, formada por monjes y monjas, estuvo bajo las órdenes de Kyneburga.
A principios del siglo XI fueron los monjes benedictinos quienes pusieron rumbo a este curioso monasterio, y empezaron a trabajar en él. Un año a destacar en la historia de este templo nos hace viajar al año 1089, cuando Guillermo el Conquistador dio orden de construir el edificio que conocemos en la actualidad, y que fue llamado Abadía de San Pedro.
A pesar de todo, en el año 1541, el rey Enrique VIII disolvió esta abadía para fundar, finalmente, la catedral para esa diócesis anglicana de la ciudad. Entre sus numerosos elementos a destacar, nos encontramos con su icónica fachada oeste, donde descubrimos un imponente vitral de colores de mediados del siglo XIV en el que se refleja a un golfista. Estamos, indudablemente, ante la representación más antigua del golf que encontramos en todo el planeta.
Es importante tener en cuenta que, debido a sus largos siglos de historia, esta no es la única curiosidad que esconde la Catedral de Gloucester. Y es que precisamente por su imponente estructura y, sobre todo, su enigmática belleza, se tomó la firme decisión de utilizarla en los rodajes de Harry Potter para Hogwarts. De esta forma, muchos son los seguidores de la saga que no dudan un solo segundo en viajar hasta Gloucester para, en cierta manera, meterse en la piel de sus personajes favoritos.