ARGENTINA
Es el momento de conocer la historia que hay detrás de la Catedral de La Plata, uno de los templos religiosos más sorprendentes del país.
Ponemos rumbo a La Plata, una de las ciudades más sorprendentes de Argentina. En ella, encontramos varios monumentos y construcciones que no dejan absolutamente indiferente a nadie. Una de las más significativas es, sin lugar a dudas, la conocida como Catedral de la Inmaculada Concepción o Catedral de La Plata.
No solamente es considerada como uno de los templos más importantes de América, sino también una de las más grandes de todo el planeta. Para conocer el origen de esta construcción, debemos tener en cuenta que fue un proyecto del Departamento de Ingenieros de la provincia de Buenos Aires, capitaneado por Pedro Benoit, siguiendo los dibujos realizados por Ernesto Meyer en colaboración con Emilio Coutaret.
La Catedral de La Plata, a través de su historia
Para poder construir este templo católico, el equipo se inspiró en dos grandes catedrales de Europa. Estamos hablando de la de Amiens, situada en Francia, y la de Colonia, que encontramos en Alemania. En cuanto a estilo, predomina el neogótico y la primera piedra fue colocada en el año 1884.
Un dato curioso es que ese acta de fundación está ubicada en una urna de cristal junto a una medalla con la imagen del Papa León XIII y una serie de monedas de plata y bronce. Todo ello, está en una caja de mármol en el que podemos leer lo siguiente: “ANNO DOMINI 1884”.
En 1902 se erigió la Parroquia Nuestra Señora de los Dolores. Pero no fue hasta noviembre de 1932, coincidiendo con el cincuentenario de la Ciudad de La Plata, cuando se inauguró el Templo Mayor con una solemne misa. En esa fecha, la Catedral todavía no estaba terminada, pues las dos torres del frente no estaban acabadas y además faltaba entre otras cosas, colocar los pisos, esculturas y ornamentos. Por lo tanto, quedaron abiertas al público tanto la Parroquia Nuestra Señora de los Dolores (planta baja) como la Iglesia de la Cátedra (parte superior).
Es importante tener en cuenta que en la década de 1930, las obras de la Catedral de La Plata tuvieron que paralizarse. Al parecer, los cimientos originales eran bastante insuficientes para poder no solamente completar las torres, sino también poder revestir el templo de piedra. Al menos eso era lo que estaba establecido en el diseño original.
Otro año a destacar es la década de 1990, cuando se anunció que se procedería a la restauración del edificio. Eso sí, no se revistió de piedra pero sí que se dejó ladrillo a la vista. En diciembre de 1998, el Ballet de Teatro Argentino ejecutó una coreografía para celebrar el final de las obras. El Papa Juan Pablo II tuvo la oportunidad de bendecir este trabajo.
El ascensor, el gran secreto de la Catedral de La Plata
Es uno de los datos más curiosos de este templo, y es que en su interior podemos encontrar un ascensor. Gracias a él, podemos acceder a un punto tan alto que nos permite tener unas vistas impresionantes de La Plata. A este recorrido se accede con guía, y se puede hacer cada 30 o 45 minutos, en los horarios establecidos por la organización. ¡No puedes dejar pasar la oportunidad de utilizarlo!