Europa
Europa está repleta de construcciones singulares que llaman la atención de cualquier mirada y cámara. Durante la Edad Media, el continente se llenó de edificios de piedra que, detrás de sus muros, escondían misterios y secretos tan fuertes que han conseguido perdurar a través del tiempo. Su aspecto imponente quita el aliento a primera vista, y su encanto perdura en la memoria de todos aquellos que los visitan y se animan a adentrarse en su interior.Castillos, fortalezas, murallas, palacios… todos ellos compitiendo en tamaño, altura y seguridad. Hubo un tiempo en el que se construyeron con forma de estrella o con dobles muros, aunque casi siempre han ido acompañados de accidentes geográficos como acantilados o promontorios rocosos o bien fosos con agua artificial o natural, sin duda, la opción más fiable para lograr una mayor protección. Siglos después, muchas ciudades europeas aún conservan, prácticamente intactos, castillos que están rodeados por ríos o lagos en los que el agua actúa como obstáculo defensivo, además de embellecer el entorno que rodea la construcción. El agua tiene el poder de otorgar un mayor halo de misterio a estos castillos, que han logrado mantenerse a pesar de la humedad que rodea sus cimientos. Te presentamos cinco de los más hermosos de nuestro continente, que bien podrían ser los protagonistas de cualquier postal o escenarios de película. Cinco castillos que merece la pena contemplar y visitar, en Dinamarca, Francia, Alemania, Holanda y Lituania, ¿te animas a seguir esta ruta medieval?