Portugal
Es el momento de conocer todos los detalles de Monsaraz, uno de los pueblos más bonitos e históricos del Alentejo portugués.
Si estás deseando visitar la región del Lago de Alqueva, tendrás la oportunidad de descubrir un precioso pueblo medieval llamado Monsaraz. Es, sin lugar a dudas, uno de los más bonitos del conocido Alentejo portugués. Estamos ante un rincón de ensueño que no te dejará indiferente.
Sus empedradas calles están rodeadas de una muralla medieval. Por lo tanto, son verdaderamente perfectas para poder disfrutar de la magia que se respira en Monsaraz. La historia está marcada por su posición estratégica, por lo que a lo largo de la historia ha sido uno de los rincones más disputados por diversos pueblos de la zona, desde la Prehistoria.
Desde romanos, judíos, visigodos hasta musulmanes. Estos últimos ocuparon el lugar en el siglo VIII, cambiando el nombre por Sarish. Es entonces cuando anexionaron la localidad al reino Taifa de Badajoz. Recordemos que fue uno de los más grandes e importantes del imperio árabe – musulmán.
En el próximo año 1167, Monsaraz fue finalmente reconquistada por Gerardo sem Pavor, un conocido noble de Portugal que ayudó al rey Alfonso I, ocupando ciertas ciudades como Cáceres, Trujillo o Évora. Lamentablemente, tras la derrota del monarca años después en Badajoz, Monsaraz cayó en manos musulmanes una vez más. Tenemos que irnos al año 1232, cuando Sancho II reconquista de manera definitiva la localidad, donándola posteriormente a la Orden del Temple.
Por lo cerca que está Monsaraz a la frontera española, durante las conocidas Guerras de Restauración, la Corona de Portugal mandó construir un recinto amurallado, diseñado por dos reconocidos ingenieros franceses. La finalidad era tener una nueva línea de defensa, junto a las conocidas ciudades de Olivença, Elvas, Juromenha y, por supuesto, Mourão.
Actualmente, esta preciosa villa portuguesa es algo así como un museo al aire libre, disfrutando del pasado, de sus calles y de sus edificios. Atrás quedaron, de una vez por todas, las numerosas batallas que se libraron en la misma localidad y, sobre todo, a sus alrededores.
¿Qué ver en Monsaraz?
Tiene dos arterias principales: Rua de Santiago y Rua Direita. Gracias a esto se accede a las cuatro puertas de la localidad: Porta da Vila, Porta da Évora, Porta d’Alcoba y Porta Buraco. Te recomendamos que visites Monsaraz al atardecer, puesto que los rayos de sol tiñen de color rojizo sus edificios y hace que todo sea aún más bonito.
No se puede acceder al pueblo en coche, por lo que tendrás que dejarlo en un parquin a las afueras. Podrás disfrutar de la Capilla de San Juan Bautista, así como la Capilla de San Benito. Por si fuera poco, también podemos disfrutar de una de las edificaciones más curiosas de Monsaraz: Casa del Juez de Afuera.
¡Pero no todo quede ahí! La antigua cisterna de la localidad fue construida a finales de la Edad Media y se cree que está ubicada en la antigua mezquita, que data del siglo XI. En la Plaza Largo doctor Nuno Álvares Pereira podrás encontrar la Iglesia de Nuestra Señora de la Laguna o Matriz, una de las más sorprendentes y bonitas de esta zona.
Uno de los rincones más visitados de Monsaraz es, sin lugar a dudas, su imponente Castillo. Se trata de una fortificación cuya construcción se realizó durante los reinados de Alfonso III y Dinis I. Esta edificación está dominado por la Torre del Homenaje, levantada tiempo después, concretamente en el siglo XIV. Otra de las torres más pintorescas que encontrarás en Monsaraz es la Torre das Feiticeiras (o de las Hechiceras).
En este lugar también nos podemos encontrar una Casa de la Inquisición y, aunque el nombre puede llevar a confusión, este edificio jamás llegó a funcionar como tribunal del Santo Oficio. Recordemos que éste estaba cerca de la ciudad de Évora. Y, cómo no, te recomendamos que pasees por la antigua judería de Monsaraz, puesto que sus calles y sus casas te harán sentir que el tiempo se ha detenido para siempre.