BOTSWANA SALVAJE
Sin duda, el Chobe es uno de los ríos más impresionantes de África, una franja azul que brilla imponente en un territorio árido y agreste al que llena de vida. Cuando nos acercamos a la pequeña ciudad de Kasane, la primera visión del río, ya sea llegando en avión o en coche, es simplemente espectacular.
Kasane es el centro administrativo del Distrito de Chobe y la pasarela de entrada hacia el Parque Nacional del mismo nombre. También es un punto importante, a tan solo 100 kilómetros de las cataratas Victoria (Zimbabwe), Livingstone (Zambia) y Caprivi Strip (Namibia). Y es que está situado a poca distancia de la confluencia del Chobe con el Zambeze, donde cuatro países se encuentran: Botswana, Zambia, Zimbabwe y Namibia.
De hecho, a pocos kilómetros de distancia, en Kazungula, hay un ferry que cruza de Botswana a Zambia.
Centro indiscutible de safaris de naturaleza en el país, en la carretera que corre a lo largo del río y hacia el interior no faltan hoteles y campamentos para todo tipo de presupuestos. De hecho, es un lugar tan único este rincón de Botswana que nos permite explorar todo tipo de destinos sin necesidad de cambiar de base de operaciones. Eso sí, en Chobe hay tanto que ver, que es posible que no quieras salir del fascinante Parque Nacional.
Este alberga una diversidad y concentración de fauna tan importante, que no existe ninguna igual en todo el país. Un vasto territorio que incluye llanuras aluviales, grandes pantanos y exuberantes bosques. Y es que el río abarca cuatro áreas geográficas distintas: el Chobe Riverfront, las sartenes Ngwezumba, Savute y Linyanti.
La zona más accesible y más visitada del país, donde se concentra la mayor parte de los safaris de Botswana, es Chobe Riverfront, famosa por sus grandes manadas de elefantes y búfalos del Cabo, que durante los meses secos del invierno se acercan al gran río a beber. Aquí, en ese momento del año, por las tardes, se pueden ver cientos de elefantes a la vez. Un espectáculo que nos ofrece la naturaleza único, fascinante y mágico. Es más, es probable que te veas rodeado de elefantes, ya que la carretera principal Serondella se vuelva intransitable y decenas de ejemplares la crucen en su camino hacia el río para beber, bañarse y jugar.
A la orilla del río se pueden ver hasta 15 especies diferentes de animales (antílopes, lechwe, pukus, jirafas, kudus, impalas, jabalíes, antílopes, monos, babuinos...) junto a depredadores como leones, leopardos, hienas y chacales. Una concentración que nos asegura momentos emocionantes e inolvidables.
Una de las opciones aquí es hacer un crucero por el río a través del parque, para ver a los animales desde otro punto de vista. Será el turno para los hipopótamos, los cocodrilos y una gran variedad de aves acuáticas, y todo ello navegando sin prisa y disfrutando de la naturaleza. Hay más de 460 especies de aves en el parque, por lo que es uno de los lugares principales para el avistamiento de toda África.
El río Chobe nace en las tierras altas del norte de Angola y viaja enormes distancias antes de llegar a Botswana, en Ngoma. Al igual que los ríos Okavango y Zambeze, su curso se ve afectado por las fallas del Gran Valle del Rift. Estos tres poderosos ríos llevan más agua que todos los otros ríos en el sur del continente negro.
Otras zonas del Parque Nacional de Chobe son las Sartenes de Ngwenzumba, que se encuentran a unos 70 kilómetros al sur del río Chobe. Se trata de un área de ollas de barro rodeadas de bosques y llanuras de pastizales; Linyanti, que en invierno es también un lugar de avistamiento excelente; y Savute, en el interior del parque, conocido por sus depredadores, sobre todo leones, guepardos y hienas, con grandes poblaciones residentes.
Si buscas un destino de safari, Botswana te ofrece mágicos emplazamientos en los que disfrutar de la naturaleza. Pero como Chobe, que permite incluso acercarse al lugar donde "el humo ruge": las famosas Cataratas Victoria, ninguno.
Más información:
Parque Nacional de Chobe
Turismo de Botswana