UN VIAJE DE ALTURA EN LOS ALPES SUIZOS
Situado a una altitud de 1.132 metros, Hammetschwand es el ascensor al aire libre más alto de Europa. Y lo es desde hace ya 105 años. Un viaje a bordo de su cabina forma ya parte de la historia de esta zona de los Alpes Suizos. Hoy en día, el ascensor hace el recorrido de subida, 152 metros, en menos de un minuto, y la emoción de acelerar tan rápidamente hacia el cielo solo se ve superada por la emoción de disfrutar de una vista espectacular. Y es que, una vez llegas arriba, las puertas se abren a impresionantes vistas panorámicas del lago de Lucerna y de los Alpes suizos.
Desde principios del siglo es la vía más rápida hasta el mirador más alto de Lucerna. De hecho, fue creado por un popular hotel cercano, y fue diseñado para llevar a los visitantes a lo más alto para que pudieran deleitarse con las hermosas vistas. El complejo hotelero Bürgenstock ha sido desde siempre un lugar de vacaciones muy popular, y su atractivo se ve reforzado por el espectacular camino a lo largo de la pared de roca vertical y por el ascensor abierto al aire libre. El ascensor, construido e inaugurado por el Grupo Schindler, fue considerado como una hazaña pionera en esos días, y sigue siéndolo a día de hoy, ya que el ascensor Hammetschwand sigue siendo el ascensor exterior más alto de Europa.
Desde los hoteles del Bürgenstock, hay un camino, conocido como el camino de los peñascos, que lleva a la estación inferior del ascensor en el interior de la roca. Un complemento perfecto para esta atracción. Porque después de la caminata, la subida de apenas un minuto que nos lleva de nuevo al aire libre resulta una recompensa muy gratificante. Para hacer esta excursión hasta Hammetschwand hay que llegar a la parte oriental del famoso sendero por la roca. El pequeño circuito comienza en el Honegg, y va directo al sendero de la roca y al ascensor. La excursión comienza en el lado sudeste del Bürgenstock, junto al aparcamiento del bosque, cerca del Honegg, pasa por delante del singular hotel Honegg y sube al Chänzeli. Un poco más arriba, comienza el tramo oriental del sendero por la roca, que pasa a través de varios puentes y un túnel, y llega a la estación inferior del ascensor Hammetschwand, en el interior de la roca. Este es el camino más rápido para llegar al mirador situado a mayor altura de la ciudad de Lucerna y al ascensor al aire libre más alto de Europa.
Tras una pausa en la plataforma del Hammetschwand o en el restaurante, podemos emprender el descenso. Desde el Hammetschwand hay senderos por los que se puede regresar paseando tranquilamente hasta el Bürgenstock, o se puede volver por el camino de los peñascos pasando por Känzeli. Eso sí, el camino de los peñascos hasta la estación inferior del ascensor Hammetschwand solo se puede recorrer en verano cuando la climatología es más benigna.
En verano, la torre del ascensor se ilumina por la noche y su silueta puede verse desde la ciudad.
Para llegar al ascensor salen de Lucerna tres conexiones en barco hacia Kehrsitten-Bürgenstock, también hay un funicular desde el lago al Bürgenstock que actualmente está fuera de servicio pero que se va a poner de nuevo en marcha en 2017, y también hay un pequeño autobús desde Stansstad previa reserva que nos acerca a la zona.
Sin duda, si decides acercarte a Lucerna esta primavera, el camino por los peñascos con las empinadas vistas hacia abajo hasta el lago y el insólito ascensor son atracciones imprescindibles. El ascensor panorámico Hammetschwand es para los amantes de la aventura y que no tienen miedo a las alturas. Las imponentes vistas de la pared de roca que cae abruptamente desde su terraza panorámica en la cima del Monte Bürgenstock es simplemente sensacional, la terraza y la subida meteórica en el ascensor.
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Hammentschwand Lift Bürgenstock