Asia
Estamos acostumbrados a escoger el hotel una vez que ya hemos decidido el destino. Buscamos y rebuscamos opciones que se ajusten al presupuesto o que estén muy cerca de la actividad que se nos antoja hacer. Pero, ¿qué pasaría si esta vez las cosas son al revés y el hotel en sí mismo se convierte en el destino de tus vacaciones? No estamos hablando de esos espectaculares resorts que son como mini ciudades para disfrutar perdiéndose en sus múltiples opciones de ocio o descanso. Estamos hablando de hoteles diferentes y sorprendentes que se convierten en experiencias únicas. Como la de estar en medio de un entorno selvático durmiendo en una casa con suelos transparentes que dejan ver un espectacular paisaje subacuático con peces nadando plácidamente, mientras te relajas. O como cuando decides ser niño nuevamente durmiendo en tu casa del árbol. Claro que esta vez la construcción más bien se parece a una burbuja de madera que está colgando de las ramas y se mece suavemente con la brisa. A veces, esa vivencia memorable es cuando tu habitación es una cueva que te hace olvidar de casi todo lo que te ofrece un hotel tradicional. ¿Que por la mañana te apetece un café? Abrígate, que te toca primero ir a cortar leña y encender el fuego. Si de experiencias se trata, tal vez la opción sea ir a una escultura habitable con pasillos que parecen laberintos que siempre te llevan a ver un atardecer de esos que quitan la respiración. Aunque puede ser que la experiencia única sea la de estar en el medio de Ýfrica en una cabaña casi transparente que te permite formar parte del paisaje, mientras leones, jirafas, hipopótamos y elefantes pasean cerca de tu terraza privada. Estas curiosidades en donde descansar se encuentran en cualquier rincón del planeta, basta con salir de las guías tradicionales para descubrir la Udang House (Indonesia), el Free Spirit Spheres (Canadá), el Kolarbyn Ecolodge (Suecia), Casapueblo (Uruguay) y el Lion Sands (Sudáfrica). A esta selección de hoteles atípicos para vivir unas vacaciones diferentes, puedes sumarle algunos de los hospedajes de los que ya hemos hablado como el Kakslauttanen que te ofrece la posibilidad de dormir en un iglú o la habitación submarina del hotel flotante ZanZibar o el hotel para fanáticos de Harry Potter, incluso el temático de diseño, que en su decorado juega con los colores Pantone.