ESCAPADAS ROMÁNTICAS
Para los irlandeses hay en febrero un día más romántico que el de los enamorados, el 29 de febrero que sólo pueden celebrar en los años bisiestos como 2024.
El 29 de febrero es el día en el que, tradicionalmente, las mujeres se empoderaban y tomaban la iniciativa, ese día, y sólo ese día, podían ser ellas quienes propusieran matrimonio a sus parejas sin que fuesen tachadas de atrevidas, descaradas ni cosa semejante; se trata de una tradición tan popular como la de regalar el anillo Claddagh… Ahora bien ¿de dónde vienen estas tradiciones tan curiosas?
El origen del anillo Claddagh tenemos que buscarlo en la aldea cercana a Galway del mismo nombre, se trata de un anillo que no luce una piedra ni un brillante sino un corazón coronado y sostenido por dos manos que se empezó a fabricar en esta localidad irlandesa hace más de 300 años: el corazón simboliza el amor, la corona la lealtad y las manos la amistad, es por eso muy popular como anillo de compromiso por lo que combina de escándalo con el 29 de febrero…
Y es que el 29 de febrero, como bien vimos en la película Leap Year (Tenías que ser tú) protagonizada por Amy Adams, es el día en el que las mujeres irlandesas se permiten ser ellas quienes lleven la iniciativa en el amor, algo que hoy en día nos parece algo tan natural pero que no hace tantos años era impensable, de ahí que ese día fuera tan importante, era el día en el que las mujeres podían tomar la iniciativa sin que eso afectase a su reputación (tanto si su propuesta de matrimonio era aceptada como si no era así). Ahora bien ¿cuál es el origen de esta curiosa tradición?
Según la leyenda la culpa fue de San Patricio y Santa Brígida quienes, allá por el S.V, discutían acerca de lo injusto que resultaba para las mujeres tener que esperar callada y discretamente a que fuera el hombre quien se decidiera a pedirles matrimonio; San Patricio les concedió entones a las mujeres el derecho a ser ellas quienes tomaran la iniciativa pero sólo un día, el 29 de febrero. Eso dice la leyenda… pero lo cierto es que no hay constancia de la celebración de esta tradición hasta el S.XIX aunque sí un rastro legal que nos confirma que se trata de una tradición más antigua: la ley promulgada por la Reina Margarita de Escocia según la cual todo hombre que rechazara la propuesta de su novia debía compensarla pagando una multa…