JAPÓN
Cuando pensamos en Japón tenemos a quedarnos en la isla de Honshu, la más grande y poblada del país pero lo cierto es que Japón es un gran archipiélago de 6852 islas entre las que están las Islas Oki.
Sólo el archipiélago del Parque Nacional de Daisen-Oki, conocido popularmente como las islas Oki, cuenta con casi 200 islas que han sido reconocidas como Geoparque Mundial por la UNESCO y que se han convertido en todo un paraíso para los amantes de los deportes acuáticos y de la naturaleza por sus paisajes marinos, sus densos bosques, sus tesoros geológicos y sus imponentes cascadas. Si eres un ecoturista de los que gozan del senderismo y la aventura en tierra y de los deportes acuáticos en el mar tienes que incluir estas islas niponas entre tus destinos por descubrir y visitar.
Lo primero que debes saber de las Islas Oki es es que solo 4 de las casi 200 que conforman este archipiélago están habitadas, la mayor de todas ellas es Dogo y es la que no te puedes perder porque en ella podrás maravillarte ante las fascinantes cascadas de Dangyo, famosas porque sus aguas purifican a los luchadores de sumo antes de una competición; son dos cascadas: Medaki que es la femenina y lleva menos agua y Odaki que es la masculina y cuenta con una imponente caída de 40 metros. Además de estas cascadas, la isla de Dogo te conquistará por su brutal costa desde Jodogaura a la península de Shirashima y la Roca de la Vela, así llamada porque cuenta con un monolito volcánico de 20 metros sobre el mar.
De la isla de Dogo nos vamos a la de Nishinoshima, segunda en tamaño y la más espiritual de este archipiélago: es hogar de Takuhi-jinja, un templo budista transformado en santuario sintoísta y ubicado endenté de una cueva en lo alto de una ladera del monte Takuhi; el santuario de Yurahime es otra de las visitas obligadas de esta isla porque aquí regresan los dioses cada 29 de noviembre… (según reza la leyenda, claro).
Volviendo a la naturaleza brutal de estas islas visitamos Nakanoshima, famosa por sus acantilados rojizos de Akiya y por las espectaculares vistas que se disfrutan desde el cabo Kirogasaki; la cuarta isla habitada del archipiélago natural de las Islas Oki es Chiburi-jima donde viven más peludos tanuki (perros mapache) que humanos…
¿Lo más espectacular de las Islas Oki? Las aguas que rodean estas islas porque son excepcionalmente cristalinas e ideales para la práctica del esnórquel o el kayaking, para pescar y por supuesto también para nadar a placer y bucear; eso en cuanto al mar y sus playas, en cuanto a la tierra, lo mejor es recorrerla sin perder la costa de vista, visitando lugares tan inolvidables como el acantilado de Matengai o el de Jodogaura; si eres un senderista experto, uno de esos que tiene además alma de aventurero, anímate a subir hasta la cima del monte Takuhi porque las vistas que descubrirás son únicas e inolvidables.