LEEDS - INGLATERRA
Kirkstall Abbey es, sin lugar a dudas, uno de los lugares que debes visitar si decides pasarte por Leeds. Esta es su historia y todo lo que debes saber.
Kirkstall Abbey, o abadía de Kirkstall, es una de las edificaciones más conocidas y especiales que podemos encontrar si decidimos visitar Leeds. Y siendo honestos, no es para menos. No solamente es una visita obligada, sino que su espectacular arquitectura logrará dejarnos sin palabras.
Estamos ante las ruinas de lo que era un antiguo monasterio Cisterciense, situado a las afueras de la ciudad inglesa, a unos 15 minutos. Se fundó en el año 1152, aunque bien es cierto que tardó un total de 75 años en construirse. Contaba con un total de tres capillas, así como un pequeño coro con nada más y nada menos que dos filas. A pesar de convertirse en uno de los monasterios más conocidos y respetados del país, se cerró en una época muy importante en la historia de Inglaterra.
Estamos hablando, cómo no, en la conocida Disolución de los Monasterios que llevó a cabo el rey Enrique VIII. El paso del tiempo empezó a hacer de las suyas, dando paso a una edificación que llegó a estar en ruinas. ¡Pero unas ruinas que nos presentan una imagen absolutamente impactante, fascinante e inigualable!
Debemos tener en cuenta que esta abadía fue donada por el Coronel John Thomas North a la Corporación de Leeds. Este gesto hizo posible que, a finales del siglo XIX, consiguieran abrir al público esta abadía después de una serie de necesarias reformas debido a su estado de abandono. El esfuerzo mereció la pena puesto que, entre otras cuestiones, el edificio de la casa del guarda pasó a ser un museo.
En la actualidad se puede visitar de 10 horas a 16 horas todos los días de la semana, para contemplar de cerca la impactante estructura que presenta este monasterio, así como los restos de la antigua muralla, la casa del abad y otras tantas zonas. Bien es cierto que cuando esta abadía se abandonó, muchos elementos quedaron destruidos. Esto hizo que los monjes no tuvieran la opción de regresar. A pesar de todo, la ciudad de Leeds está haciendo un esfuerzo para recuperar uno de sus edificios más históricos y, por el momento, ¡va por muy buen camino!