La ciudad de los rascacielos
Nueva York es una de las ciudades más especiales del mundo. Millones de personan la visitan cada año, pero existen ciertos lugares que pasan desapercibidos por ser algo secretos. Por ese mismo motivo, hemos querido recapitular ocho de ellos para que puedas disfrutar de su magia.
Nueva York es la ciudad que nunca duerme, pero también la que esconde un grandísimo número de secretos e historias en sus calles. Si estás planeando visitarla, aquí existen ocho de ellos que son algo desconocidos por los viajeros y, sin embargo, te sorprenderán muy gratamente.
Estación fantasma de City Hall
Uno de los rincones secretos de Nueva York que tienes que descubrir es, sin lugar a dudas, la estación abandonada de Old City Hall. Despierta una grandísima curiosidad entre todos aquellos que deciden visitarla año tras año. Cerró sus puertas en 1945 pero, a pesar de todo, los espectaculares techos abovedados y, por supuesto, las elegantes paredes de la estación siguen intactas.
¿Cómo puedes verla? A través de dos opciones. Por un lado, realizar una visita guiada organizada por el New York Transit Museum, ya que organizan varias al año. Por otro lado, subir al metro de la línea 6. ¿Qué tendrías que hacer? En vez de bajarte en la última parada (Brooklyn Bridge, City Hall), deberías quedarte dentro del vagón siempre y cuando los operarios no te digan nada. Para dar la vuelta, el metro pasa por la estación fantasma de City Hall. No podrías bajarte allí, pero sí podrás observarla desde dentro.
Irish Hunger Memorial
La Gran Manzana ha sido y será siempre todo un hogar para millones de inmigrantes irlandeses. Por ese mismo motivo, la ciudad de Nueva York ha querido dedicarles un monumento, concretamente a la Gran Hambruna que tuvo lugar entre 1845 y 1849. ¿En qué consiste? En todo un montículo cuya función es representar un paisaje rural de Irlanda.
Por si fuera poco, cuenta con vegetación y rocas transportadas desde el propio país irlandés, así como una preciosa y pequeña casa de piedra abandonada junto a estos campos. ¿Dónde está ubicado? Entre World Trade Center y el observatorio One World. A pesar de todo, suele pasar desapercibido por los viajeros que se encuentran paseando por esa zona.
Puente High Bridge
Los puentes más míticos de Nueva York son, sin lugar a dudas, el de Manhattan y Brooklyn. Pero, ¿sabes cuál es el puente más antiguo de la ciudad? Se llama High Bridge y se inauguró en 1848, aunque fue reabierto en 2015. Conecta el norte de Manhattan con el Bronx. Para verlo, es recomendable realizar un paseo por el espectacular Highbridge Park hasta llegar al río Harlem. De ahí, pasar por el sendero hasta llegar a la secreta mansión de Morris-Jumel. ¡Te encantará!
New York Marble Cemetery
Muchos son los cementerios que antiguamente se ubicaban en Manhattan y, poco a poco, fueron desapareciendo tras la urbanización de la ciudad. A pesar de todo, en la zona del East Village podrás encontrar algo muy especial, el New York Marble Cemetery.
Está ubicado en un estrecho callejón, entre espectaculares edificios. Aunque, a primera vista parezca un jardín, es un cementerio que se inauguró en 1831. En esta época, las sepulturas en tierra hacían posible que se transmitieran muchas enfermedades contagiosas. Con lo cual, los fallecidos comenzaron a ser enterrados en bóvedas subterráneas de mármol.
De ahí el nombre del cementerio. Suele abrir una vez al mes, por lo que si coincide justo cuando estás visitando Nueva York, no dudes ni un solo segundo en visitar este peculiar y desconocido rincón ubicado en East Village. Estamos segurísimos de que te fascinará completamente.
Falsa casa de Brooklyn Heights
Uno de los barrios más característicos de Nueva York es, sin lugar a dudas, el de Brooklyn Heights. Sus casas son sencillamente preciosas, se miren por donde se miren. Pero hay una que esconde un secreto tremendamente peculiar. ¿En qué consiste exactamente? Si decides pasar por esta zona, fíjate en el número 58 de Joralemon Street.
A primera vista parece una casa más, pero todas y cada una de las ventanas están completamente pintadas de negro. La puerta, a su vez, tiene muchísimos carteles. Ahora bien, ¿por qué? La realidad es que esta casa únicamente es una fachada. En su interior existe un espectacular sistema de ventilación, que cuenta con una salida de emergencia nada más y nada menos que al propio metro de Nueva York.
Escultura de Bart Simpson
¿Eres de los que ha visto miles de capítulos repetidos de Los Simpson? Esta escultura es la tuya. Está ubicada en Midtown puesto que allí encontrarás el busto de Bart Simpson. O bueno, mejor dicho, de Bartman. Está situado en una plaza frente a las míticas oficinas de Fox News, bastante cerca de Rockefeller Center. Lo más curioso es que fue esculpido por la actriz Nancy Cartwright, es decir, la que da voz a Bart Simpson en la serie.
Túnel cascada del edificio McGraw-Hill
Es uno de los más conocidos, pero no podíamos evitar dejarlo plasmado aquí. Está situado a unos pasos de Times Square. Es un espectacular túnel de forma circular con una cascada incorporada. Conecta, de manera directa, las calles 48 y 49, entre la sexta y la séptima avenida. Se trata, sin lugar a dudas, de uno de esos espectaculares rincones que jamás imaginarías encontrar en mitad de Manhattan, ¿no es así?
Faro del puente George Washington
Nueva York es la ciudad de las luces, por lo que nos resulta extraño que exista un faro. Pero claro, hace algo más de un siglo, navegar por el espectacular río Hudson no era del todo fácil. Con el fin de evitar accidentes en la zona, decidieron instalar en 1921 este pequeño faro llamado Little Red Lighthouse en el lugar donde se encuentra actualmente el parque Fort Washington.
Pocos años después decidieron construir justo encima el famoso puente George Washington. Con las luces que desprendía, el faro quedó en un segundo plano. A pesar de todo, este precioso Little Red Lighthouse sigue presente, convirtiéndose en toda una sorpresa para los visitantes de la ciudad de Nueva York.