Un viaje en el tiempo
En Petén (Guatemala), se han encontrado grandes ciudades. Dentro de la Reserva de la Biosfera Maya descubrimos la mayor concentración de ciudades de esta civilización. Visitándolas podemos conocer más de cerca como era esta cultura prehispánica.
Gracias a las nuevas tecnologías se han podido conocer las dimensiones de estas ciudades, muchas de ellas, ocultas bajo la jungla. A lo largo del pasado año se ha descubierto que estos núcleos eran verdaderas megalópolis que concentraban el poder de la región. Se calcula que quedan por explorar 20.000 km2 de ciudades enterradas. Todo el poder comercial, económico y político se concentraba en ellas y esto daba lugar a disputas con otras ciudades estado próximas.
Tikal es la más importante y el centro político-económico de la región. Estudios anteriores estimaban que las ciudades tenían cinco mil de habitantes, en la actualidad se afirma que pudo tener entre 10 y 15 mil de habitantes. Esta investigación ha sacado a la luz en esta ciudad 60 mil estructuras descubiertas corresponden justamente a casas-habitación de los sectores medios y bajos de la ciudad, y dan una idea del tamaño que alcanzó Tikal. Otro descubrimiento sorprendente fue la gran cantidad de muros, fortalezas y fosos que aparecieron. Una muestra del gran poder militar de la ciudad que controlaba la región.
Al norte de Tikal aparece Uaxactún. Esta ciudad se levanta en cinco elevaciones y está formada por ocho núcleos urbanos. Alrededor de estos núcleos aparecen zonas residenciales. Lo diferentes núcleos urbanos presentan palacios, juegos de pelota, templos e incluso un centro de observación astronómica. Destacar que dentro de estos complejos aparecen diversos murales y frisos.
En Kunal han aparecido gran cantidad de pozos y terrazas destinadas al cultivo. Por otro lado, este emplazamiento también poseía un espacio ceremonial. Esto nos hace tener una idea de la capacidad de adaptación al medio y producción que tenían los mayas.
Witzna es un núcleo más pequeño y estaba conectado con una calzada al núcleo principal de tipo religioso. El espacio está dispuesto en dos niveles y presenta una gran acrópolis. Destacar las tres estelas que se encuentran del complejo religioso y el campo de juego de pelota.
No todo van a ser restos arquitectónicos. En la ciudad de Holmul, situada al sur de Witza, han aparecido pinturas y frisos. En éstos aparecen reflejados reyes y dioses relacionados con la ciudad. Todos estos restos han sido contextualizados gracias a vasijas y piezas cerámicas encontradas en la misma.
Las civilizaciones prehispánicas siguen deslumbrándonos día a día. Cada nuevo hallazgo es una dosis nueva de información que nos permite seguir construyendo el puzle sobre su existencia.