Imperdibles
Una de las mejores maneras de disfrutar de nuestro país es coger un coche y dejar que la carretera nos lleve no solo por sus grandes capitales sino también por sus pueblos más escondidos. ¡Te lo contamos!
Si tú también amas viajar, seguramente hayas soñado en alguna ocasión con coger el coche al amanecer y dejar que sea la carretera la que te guíe, hacia ninguna parte y hacia todos los destinos al mismo tiempo. Y aunque no suele decirse mucho, lo cierto es que España es un país perfecto para este tipo de turismo.
Y es que tenemos destinos verdaderamente hermosos que uno solo puede descubrir cuando rechaza las rutas oficiales y decide moverse por carreteras secundarias que conducen a pueblos de los que quizá nunca había oído hablar pero que terminan convirtiéndose en lugares a los que volver. Bordear la costa del norte del país o hacer lo propio en el sur de la península son planes que no siempre aparecen en la lista de prioritarios pero que constituyen una experiencia inolvidable. A continuación, os dejamos unas cuantas rutas que tenéis que apuntar si sois de los que quieren descubrir de lo que estamos hablando.
1. Galicia.
Situado en un extremo del país, Galicia es uno de esos territorios con una identidad marcada y un encanto muy especial. Podemos empezar nuestra ruta en Vigo, para visitar las Rías Baixas, y después continuar hacia Pontevedra y sus paisajes costeros, dirigiéndonos hacia Santiago de Compostela. Desde allí, la famosa Costa da Morte es siempre una elección magnífica, pues reúne varios de los paisajes más espectaculares de la península; y debe su nombre al peligro que entrañan sus acantilados.
2. País Vasco.
Nos quedamos en el Norte y no tenemos más que desplazarnos un poco hacia el este para maravillarnos con los paisajes que puede ofrecernos el País Vasco. Además de disfrutar de sus ciudades (desde Bilbao hasta San Sebastián, todas son hermosas), es obligatorio tener un buen mapa a mano y conducir sin pensar demasiado, tomando una u otra carretera, preferiblemente cerca de la costa. Vayamos donde vayamos encontraremos paisajes que nos robarán el aliento, una gastronomía que nos lo devolverá y una experiencia inolvidable recorriendo una de las zonas más hermosas de España.
3. Asturias.
Es cierto que lo más recomendable cuando se trata de Asturias es hacer las rutas a pie, disfrutar de los Picos de Europa como merecen ser disfrutados y subir al santuario de Covadonga con todas las de la ley, pero para desplazarte entre todos estos lugares (¡y más!) lo ideal es coger un coche que te permita moverte allá donde quieras. Asturias es uno de los lugares más paradisíacos de Europa y la mejor manera de conocerlo es tener vehículo propio y dejar que la carretera te lleve.
4. Extremadura.
Concretamente el Valle del Jerte, donde encontrarás paisajes bonitos por doquier. Como sucede con Asturias, la mejor manera de conocer una comunidad que parece un poco más olvidada que las anteriores pero que es igualmente hermosa (sobre todo durante la famosa floración de los cerezos) es disponer de un vehículo propio que nos permita movernos a nuestro gusto.
5. Andalucía.
Dependiendo de los días de los que dispongamos, la ruta por Andalucía puede ser una u otra. Nuestro consejo es que si tenéis la posibilidad de disfrutar del sur de España, lo hagáis con bastantes días por delante. Así podréis admirar sus capitales pero también la Costa del Sol como se merece, la Alpujarra (entre Almería y Granada) o de la Ruta de los Pueblos Blancos (entre Cádiz y Málaga), una veintena de pequeños pueblos de cuento que no son tan conocidos como deberían. Andalucía tiene muchos secretos y todos te están esperando.