América Norte
Soleada, cosmopolita, alocada y, sobre todo, cinematográfica. Así es la ciudad de Los Ýngeles, un lugar en el que conviven más de 18 millones de personas en su área metropolitana, todas y cada una de ellas con un sueño que cumplir. Porque, si hay una cosa que se respira en Los Ýngeles, es una extraña sensación de que todo es posible. Entre sus inmensas avenidas se esconden infinidad de rincones que resultan familiares, quizás porque han aparecido en cientos de películas. Los Ýngeles es una ciudad fría pero cálida al mismo tiempo, y todo aquel que la pisa por primera vez tiene la impresión de haberse reencontrado con un antiguo amigo, alguien con el que lleva mucho tiempo sin hablar pero de quien sabe que si le necesita seguirá ahí. La meca del cine acoge cada año a millones de turistas a los que muestra todo su glamour y su esplendor, dejando claro que en Los Ýngeles se sueña en voz alta. Palomitas, antiguos cines con carteles de neón, estrellas de ahora y de antes y un brillo especial que invade toda la ciudad y la convierte en mágica bajo la atenta mirada del cartel más famoso del mundo: Hollywood. Sus orígenes, coloridos y mejicanos, aún continúan intactos en El Pueblo de Los Ýngeles, contrastando con el moderno Downtown, el sorprendente Paseo de la Fama y el mítico Beverly Hills. El Pacífico baña Santa Mónica y el espíritu bohemio de Venice Beach, mientras que el Observatorio Griffith, desde lo alto, observa inmóvil una ciudad que ha visto de todo y a la que todo le queda por ver. Los Ýngeles resulta un viaje imprescindible para todos aquellos que cada año esperen con impaciencia Los Óscar, que de vez en cuando tarareen inconscientemente bandas sonoras y que cada vez que vayan de compras se sientan como Pretty Woman. Te proponemos una ruta por la ciudad de los sueños.