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VIAJE RELÁMPAGO A RUSIA

10 planes imprescindibles si solo puedes estar 48 horas en Moscú

Dos días no bastan para conocer la capital rusa, pero sí para hacerse una idea de por qué hay que volver a visitarla con calma. Seguir al pie de la letra las 10 recomendaciones que te damos te permitirán volver a casa con la certeza de que no te has perdido lo más importante de la ciudad.
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La capital rusa, con más de 12 millones de habitantes, es la segunda más poblada de Europa tras Estambul. Con 2.500 kilómetros cuadrados de superficie, es casi inabarcable, mucho más si apenas tenemos un par de días para conocerla por primera vez. Aunque los distritos turísticos no se encuentran demasiado alejados entre sí, una escapada corta no permite conocer bien la esencia de la misma. Sin embargo, sí que se puede uno hacer una idea de cómo vive y cómo respira la ciudad actual y sus gentes. Para ello, nada como recorrerla haciendo estos 10 planes, los cuales nos llevarán por los rincones y sabores más importantes de Moscú.

1. Catedral de San Basilio. Este templo ortodoxo es la imagen que todos tenemos en mente cuando pensamos en Moscú. Patrimonio de la Humanidad y auténtico epicentro turístico de la ciudad, fue mandado a construir por Iván el Terrible en el siglo XVI y dentro tiene una interesante exposición de frescos.

2. Kremlin. Otro de los imprescindibles, ya sea el Palacio principal, el campanario de Iván el Grande o las catedrales de la Asunción y de la Anunciación. El símbolo del poder ruso cuenta también con unos bellos jardines.

3. Plaza Roja. Aun no nos hemos movido mucho del sitio, y es que todo está en la misma dirección. Este es el centro simbólico de Rusia, una histórica plaza que ha visto zares, revoluciones y todo tipo de desfiles. Además de la catedral, aquí se encuentran el patíbulo, los monumentos a Minin y Pozharsky y el mausoleo de Lenin.

4. Teatro Bolshoi. Cualquier amante del arte tiene una deuda con este templo de la escena, la danza y la música. Inaugurado en 1825, acoge la compañía de danza más importante del mundo, no faltan recitales de Ópera y sorprende por su espectacular arquitectura y diseño.

5. Metro. En consonancia con esta opulencia artística, no lo es menos la urbanística del desarrollo surburbano de Moscú. El metro esconde auténticos tesoros artísticos, que en la Unión Soviética fueron obras de arte que homenajeaban los símbolos del pueblo y el trabajo. Kievskaya, Teatratnaya, Novoslobodskaya, Novokuznetskaya y  Mayakovskaya son las que no te puedes perder.

6. Museo Pushkin. En el barrio de Arbat, hogar de artistas y nobles rusos, luego de altos funcionarios soviéticos, se encuentra la segunda pinacoteca de arte europeo más importante de Rusia. Pero, además, alberga momias egipcias, cerámicas y esculturas helénicas... Más de medio millón de piezas en exposición.

7. Galería Tretiakov. Más recomendada si solo te interesa centrarte en arte ruso. Se exponen obras de grandes artistas locales como Mijaíl Vrubel,  Vasily Vereshchagin y Sergei Konenkov. De hecho, es la mayor colección de arte de ese país (más de 150.000 obras).

8. Café Margarita. Uno de los cafés literarios de más renombre de Europa, cuyo nombre se debe a la protagonista de la novela de Bulgakov 'El maestro y Margarita'. No falta la música de jazz ni una taza de rico café caliente y reconfortante.

9. Estatua de Pedro el Grande. Es una de las más grandes del mundo y tiene 96 metros de altura. Se acabó de construir en 1997 y representa al monarca erigido sobre un barco de vela. Está a orillas del río Moscova y es imposible que pase desapercibida.

10. Museo del Cosmos. Presenta objetos relacionados con la historia espacial soviética y rusa, incluyendo piezas de astronomía, aviación y tecnología espacial. Se encuentra debajo del Monumento a los Conquistadores del Espacio, una estructura de aluminio construida en 1964 para celebrar los logros soviéticos en materia de exploración espacial.

Más información:
Turismo de Moscú