Plaza de los Quincunces de Burdeos: ¿sabías que es la plaza más grande de Francia?

Es el momento más que perfecto para poner rumbo hasta Burdeos, donde encontramos no solamente la plaza más grande de Francia, sino una de las más extensas de Europa. Estamos hablando, cómo no, de la Plaza de los Quincunces, que cuenta con 126.000 metros cuadrados, aproximadamente.

Para conocer su origen, debemos viajar hasta el año 1820. Por aquel entonces, se decidió trazarla en la ubicación del Castillo Trompette. El objetivo era claro: evitar que se produjera una rebelión contra la ciudad. Es importante tener en cuenta que la forma actual de esta Plaza se adoptó en 1816.

Tan solo un par de años después, se decidió plantar los árboles, que fueron dispuestos en quincunces. De ahí que la Plaza adoptara este nombre tan peculiar. Cabe destacar que las dos imponentes columnas rostrales de poco más de 20 metros de altura, situadas frente al Garona, fueron erigidas en el año 1829 por Herni-Louis Duhamel du Monceau.

Una de ellas simboliza el comercio y, la otra, la navegación. No fue hasta 1858 cuando se tomó la decisión de añadir dos estatuas de Dominique Fortuné Maggesi, que representaban a Montesquieu y a Montaigne. En cuanto al monumento principal de esta Plaza de los Quincunces, debemos saber que se construyó entre los años 1894 y 1902.

El objetivo era claro: recordar a los conocidos como girondinos que fueron víctimas de “El Terror”, en la Revolución francesa. Consta de un impresionante pedestal entre dos cuencos, con caballos y tropas de bronce. Todo ello coronado con una espectacular columna con una estatua en el punto más alto, que simboliza la libertad.

Entre las tantas esculturas que encontramos en esta Plaza de los Quincunces encontramos la que simboliza el triunfo de la República o, incluso, el triunfo de la Concordia. No podemos dejar de mencionar esa Tribuna con el gallo francés, donde quedan reflejadas la Elocuencia (a la izquierda) y la Historia (a la derecha), ni esa representación a la ciudad de Burdeos, sentada en nada más y nada menos que la proa de un barco con una cornucopia.

Al pie de ese tanque donde están situados los caballos, vemos representados tres elementos: la Ignorancia, el Vicio y la Mentira. En cuanto a la cuadriga de caballos, refleja la Felicidad. Cabe destacar que los caballos originales fueron retirados en 1943 durante la ocupación de Francia por los alemanes. Posteriormente, se volvieron a colocar con su bronce perfectamente restaurado.

Un año a destacar es 2003, cuando se procedió a la instalación del tranvía. Esto provocó que la Plaza de los Quincunces se convirtiera nada más y nada menos que en el centro de transporte público más importante de toda la zona. Al fin y al cabo consta de 21 líneas de autobús, dos líneas de tranvía y una lanzadera, entre otros transportes.