ISLAS DE TAHITÍ
¿Buscas un destino de escándalo para el cada vez más próximo verano? Te proponemos uno: las islas de Tahití.
Ahora que el invierno parece dar por terminada la pequeña tregua que nos concedió y las temperaturas vuelven a ser las propias de un mes de febrero, es decir, frías... soñamos más fuerte que nunca con el verano que está por llegar y con destinos cálidos y paradisíacos como las islas de Tahití ¿quién no querría pasar allí unos días ¡o semanas! de julio o de agosto? (casi nos atrevemos a decir que de cualquier otro mes del año...); a continuación te damos algunas razones para elegir las islas Tahití y no otras de tantos paraísos terrenales como hay en el mundo:
Clima cálido durante prácticamente todo el año, vegetación tropical, aguas prístinas y de todos los tonos de azul que puedas imaginar, arrecifes de coral, biodiversidad marina y gastronómica, cultura acogedora y tradicional... bastaría una breve enumeración como la que acabamos de hacer para que nos sobraran las razones para volar a Tahití a la primera oportunidad pero si además eres un ecoturista convencido o un amante de la artesanía tienes si cabe más razones para hacer de las islas Tahití tu próximo destino.
Empezamos por las cosas de comer:
La cocina tahitiana es de lo más diversas e incluye especialidades chinas, italianas o francesas, dejando constancia así de quienes pasaron por estas islas a lo largo de la historia; además, hay bocados que no podrás dejar de probar y degustar y es que las islas de Tahití son ricas en frutas (plátanos, papayas, mangos, piñas...) y también uvas, aquí se encuentra el único viñedo del Pacífico, está en la isla de Rangiroa, la experiencia enoturística aquí es obligada.
¿Platos típicos de la cocina tahitiana? gambas de agua dulce de la Polinesia, pescado crudo a la tahitiana o preparado en el horno tradicional de Tahití que es el ahima'a; ¿más platos? Mahimahi (besugo con salsa de vainilla que se prepara en las islas de la Sociedad); Korori (¡ostras!) o Pahua (sopa con leche de coco y zumo de limón que se prepara en las islas Tuamotu y Gambier; en las islas Marquesas se degusta un rico queso de cabra al curry y la vid Remu (¡algas!) en las islas Australes.
A continuación nos detenemos en la artesanía:
Como sucede con las cosas de comer, las diferentes islas de este archipiélago tienen sus propias propuestas artesanales, puedes descubrirlas tranquilamente durante tu viaje a través de las diferentes galerías de arte y tiendas de curiosidades: las perlas y el nácar son algunos de los materiales que protagonizan la gastronomía local; también piezas textiles como los pareos son muy apreciados, también la cestería que sorprende tanto en sus cestas y esteras como en sus sombreros.
En las islas de la Sociedad tiene fama el aceite de monoi y los pareos pintados a mano; en las islas Tuamotu y Gambier la fama se la llevan las joyas y otros objetos decorativos de nácar; en las islas Marquesas triunfan las esculturas de madera, piedra y hueso y en las islas Australes la cestería.
Y completamos la terna en el Pacífico que rodea las islas de Tahití:
Piragüismo, buceo, esnórquel, paddling, surf... No hay deporte acuático del que no puedas disfrutar en las islas de Tahití, ahora bien, hay algo que todos los surfers saben y no deberías olvidar: al sur de este archipiélago es donde encontrarás la ola más potente del mundo (que no la más grande); es la ola de Teahupo'o y llega a alcanzar los 10 metros de altura. Gracias a esta ola Teahupo'o será uno de los escenarios de los Juegos Olímpicos de 2024.
¿Más experiencias naturales y ecoturísticas a disfrutar en las islas de Tahití? Plantar un coral en Moorea o en Bora Bora, visitar el Centro de Rhabilitación de Tortugas o el Arioi Center para descubrir la historia de estas islas.