Viajestic» Destinos

LA ESPAÑA COLONIAL

¿Sabes cuáles son los países del mundo con más ciudades nombradas como sus homónimas españolas?

Hay otra Córdoba, otra Mérida, otra Granada... más allá de nuestras fronteras porque hubo una España más allá de la actual.

¿Sabes cuáles son los países del mundo con más ciudades nombradas como sus homónimas españolas?Pixabay

Que Filipinas sea uno de los países, junto a México, que tiene más topónimos que son a su vez homónimos de ciudades españolas cabe que te sorprenda al menos un poco; la razón, a bote pronto, es obvia: Filipinas fue colonia española, fue de hecho de las últimas colonias perdidas allá por el 98, el nombre de este archipiélago es el que es en honor al rey Felipe II y por ello no es extraño que en Filipinas haya un Madrid y un Barcelona, una Valencia, Sevilla, Málaga... y así hasta unos 20 nombres de ciudades españolas en este archipiélago; ¿no te extraña entonces que tras tantos años en Filipinas, tantos como en países sudamericanos, no sea el español el idioma de estas islas? La explicación es histórica y doble: en primer lugar la colonización de Filipinas no fue igual que la de México, Cuba u otros países americanos, fue casi exclusivamente religiosa y no tanto cultural por ello los misioneros españoles optaron por aprender las lenguas locales, eso facilitaba su labor; este hecho contuvo la expansión del español entre la población de Filipinas y fue aprovechado por los americanos que llegaron a las islas tras la caída del imperio español; cuentan que se fletaron al menos dos barcos de profesores de inglés...

Esa es la razón por la que a pesar de haber sido parte de España tanto tiempo que cuentan con decenas de ciudades con nombre español, en Filipinas optaron por el inglés como idioma común tras la independencia ya en el S.XX del mismo modo que en Sudamérica, donde como en Filipinas se hablaban diferentes lenguas hasta la época colonial, optaron por el español como legua común.

Trujillo | Pixabay

Y ahora que ya sabes que en Filipinas abundan las ciudades homónimas de otras españolas seguro que imaginas que sucede lo mismo en México, Argentina, Colombia, Venezuela, Cuba... Y estás en lo cierto pero ¿sabías que también en lo que hoy es Estados Unidos hay ciudades con nombres que son homónimos de otras españolas? La razón es también histórica y sencilla: hay gran parte de Estados Unidos, empezando por la península de Florida y parte de California, a la que fueron los exploradores españoles los primeros en llegar, es más, fueron ellos quienes recorrieron parte tanto de la costa Este como de la costa Oeste de Estados Unidos y aunque finalmente estos territorios se coviertieron en parte del imperio inglés quedó en ellos la huella del paso por ellos de los españoles ¿sabías que en Estados Unidos hay una decenas de ciudades que se llaman Madrid? Y no es la capital la única que cede su nombre, también Valencia, Sevilla, Málaga, Granada, Oviedo, Pontevedra, Zamora, Toledo...

Santiago (de Chile) | Pixabay

El caso de Filipinas y el de Estados Unidos son tal vez los más paradigmáticos porque si bien son lugares a los que los españoles llegaron en la época colonial, el español no logró imponerse como lengua y en cambio sí dejamos otras huellas indelebles como los nombres de las ciudades (o una clara influencia del español en el tagalo, idioma filipino, por ejemplo... pero esa es otra historia).

No podemos dejar de recordar la cantidad de ciudades con nombre de ciudades españolas que hay por el mundo sin nombrar los países más obvios y retomamos aquí la respuesta directa a la pregunta que abría esta noticia: ¿sabes cuáles son los países del mundo con más ciudades nombradas como sus homónimas españolas? Filipinas es uno de ellos, también Estados Unidos, México, Argentina, Colombia, Venezuela y Perú son otros. Sólo un matiz más: estos son los países con más ciudades que recibieron como nombre el de una ciudad española pero no son los únicos ¿sabías que hay una Barcelona en los Países Bajos, una Valencia en Trinidad y Tobago, una Málaga en Sudán o una Sevilla en Jamaica?.

Si hay algo que no puede negarse es la universalidad histórica de lo español (y del español) ¿no crees?.